Focus: maestros de la estafa

Crítica de Fernando Alvarez - Todo lo ve

Cómo aprender el arte del engaño

"Focus: Maestros de la Estafa" fue rodada parcialmente en Buenos Aires y encuentra sus mejores momentos en la simpatía de Will Smith, en escenarios reconocibles y en su elenco.

La dupla de realizadores estadounidenses que ya había trabajado junta en Una Pareja Despareja -2009- y Loco y Estúpido Amor -2011-, Glenn Ficarra y John Requa, vuelve a la carga con esta película que se introduce en el mundo de la estafa, en ambientes lujosos y en una reconocible Buenos Aires en varias de sus escenas.

Focus: Maestros de la Estafa tiene el móvil del dinero como disparador y principal atractivo de un relato que se inclina más hacia la comedia romántica que a los momentos de acción. Quien realmente sostiene todo el andamiaje es Will Smith en el rol de Nicky, un estafador con experiencia que se reencuentra en Buenos Aires con la novata colega Jess -la australiana Margot Robbie, vista en El Lobo de Wall Street-. Ambos están trabajando por separado pero enfocan un mismo objetivo: el multimillonario dueño de una escudería de autos de carrera -Rodrigo Santoro-. En un mundo frío dominado por los negocios y el arte del engaño, la palabra amor puede cambiar las reglas del juego.

Si hay algo que el film ostenta es su cuidado trabajo de fotografía, que resalta los lujosos ámbitos donde se desarrolla la acción, y los escenarios reales de Caminito, San Telmo, Palermo, Recoleta y Barracas. La astucia de la trama descansa además en el peso que tiene la información que manejan los personajes para hacer lo que hacen y salir airosos en sus objetivos.

Entre automóviles de lujo, chips valiosos, matones bien armados y un agudo poder de observación, Nicky y Jess se verán involucrados en un caso que se complica más de lo debido y que hace peligrar sus vidas.

Si la película cumple con las expectativas es por la simpatía de su protagonista, la presencia de un buen intérprete como el brasileño Rodrigo Santoro -aquí pelilargo y perverso-, y la cuota de sensualidad que irradia Margot Robbie.

Por la parte argentina, Juan Minujín es el barman que juega una breve y simpática escena con Nicky.