EL NEGATIVO DE JESÚS
Dumont ofrece una mirada sobre el bien y el mal, no como estados absolutos sino desde su complejidad, como estos confluyen en sus personajes.
Bruno Dumont sitúa la acción de la historia en un espació bucólico, en uno de esos pueblos donde las personas se conocen y nadie es anónimo, donde el aburrimiento y la naturaleza lo dominan todo… hasta que repentinamente irrumpe la violencia. Dos personajes sin nombre movilizan la acción, un hombre y una mujer que caminan por el pueblo dialogaran (poco) y se prodigarán favores mutuamente de forma vital.
Personalmente disfruto mucho de la obra del director, especialmente de películas como esta que se desarrollan en una constante tensión gracias a los climas que el realizador francés construye a partir de la puesta y el sonido.
Una vez más ofrece una mirada sobre el bien y el mal, no como estados absolutos sino desde su complejidad, como estos confluyen en sus personajes. En Hors Satan quien brinda el sustento puede asfixiar con sus acciones y quien mata puede dar vida. Desde su profundo ateísmo, Dumont trabaja frecuentemente con elementos vinculados a la religión, hay un momento fantástico que cualquier buen cristiano tendrá que reconocer como un milagro.
Dumont es un personaje aparte, un director que se creyó lo del enfant terrible del cine francés y este legado lo llevó al paroxismo. Fuera de Satán es una historia cuya cadencia persistente dota al relato de una notable fluidez, sumado esto a su exquisita complejidad hace que se trate de uno de sus mejores filmes.