La inhumanidad al palo
Bajo un estilo observacional, el opus de Gianfranco Rosi (Sacro GRA, 2013) Fuocoammare (2016) plantea un acercamiento al conflicto migratorio con el eje puesto en los refugiados que llegan a la isla de Lampedusa al sur de Sicilia, como muestra fiel de una realidad cada vez más cruel, que tiene como principal escenario a la Europa indiferente frente a las miserias del tercer mundo y principalmente a las víctimas del terrorismo internacional y el capitalismo salvaje.
De un lado y otro del mar Mediterráneo, el relato se deja atrapar por una desesperada comunicación entre las autoridades italianas, quienes han detectado en pleno mar un bote repleto de refugiados, provenientes de distintos países africanos. Alcanza con escuchar la desesperación, en un inglés apurado, cuando preguntan desde Italia cuántos son y sólo se escucha “nos estamos hundiendo”. La distancia entre esas personas anónimas y quien recibe la información por radio es directamente proporcional a la del espectador con la realidad más palpable, la cual no necesita de ninguna bajada de línea política para introducir un conflicto en el que se demuestra que como humanidad estamos fracasando.