Goodnight mommy es un retrasado estreno que viene cosechando varios elogios alrededor del mundo pero a mí no me terminó de convencer.
Su principal error es que se vende como una película de terror cuando no es así porque nos encontramos ante un thriller psicológico con un par de escenas de alto impacto visual.
Hay que destacar que es una película austríaca y por lo tanto no es un cine al cual estemos acostumbrados. Puede llegar a resultar lento en comparación con Hollywood.
Su historia es poco original pero con un par de vueltas de tuerca muy buenas (aunque previsibles) que llevan a un desenlace verdaderamente abrumador. No se puede decir mucho más porque sería un gran spoiler pero comparte una gran característica con una muy famosa película del mismo género de finales de la década del ´90.
El director Severin Fiala y la directora Veronika Franz comparten ópera prima y crean una buena atmosfera (con estética de la película sueca Let the right one in, 2008) que promete mucho al principio pero que se cae rápidamente pese al excelente trabajo actoral, sobretodo el de los gemelos.
Se tarda mucho en llegar al final, que por lejos es lo mejor y único elemento que vale verdaderamente la pena.
Más que el misterio que se plantea en la premisa, póster y trailers, la verdadera incógnita es por qué este film dio tanto para hablar…