Una espectacular odisea en el espacio
"En el espacio, nadie puede escuchar tus gritos" afirmaba el slogan publicitario de "Alien, el octavo pasajero" Unos años más tarde, refiriéndose a una de sus secuelas, algún critico bromista retrucó. "en el espacio, nadie puede escuchar tus bostezos".
Y dado que muchas superproducciones de ciencia ficción con astronautas enfrentando amenazas cósmicas tan ficticias como taquilleras pueden percibirse como aburridas, a los films realistas sobre la dura vida del astronauta nunca les quedó casi nada de espacio. Tan poco, que las contadas películas imprescindibles de este género cinematográfico aún indefinido e inclasificable, son dos dramas histórico-austronáuticos: la muy premiada "Apolo 13" de Ron Howard con Tom Hanks y Ed Harris y la menos recordada -y acá sólo estrenada en VHS- "The Right Stuff" de Philip Kauffman
El único auténtico antecedente de "Gravedad" es un film de 1969, "Atrapados en el espacio" (Marooned), totalmente olvidado a pesar de haber sido dirigido por John Sturges, protagonizado por Gregory Peck y Gene Hackman, y haber ganado un Oscar a los efectos especiales. Pero "Gravedad" es un film absolutamente original en su tema sobre dos astronautas tratando de sobrevivir en el espacio cuando el trabajo de rutina que están haciendo en una estación espacial es interrumpido por una lluvia de fragmentos de satélites. También es un desafío técnico y actoral concebido para que la película luzca como nada visto antes. Más allá de algunas apariciones breves de gente con escafandra y voces como la de Ed Harris que hablan desde Houston, los únicos actores son Sandra Bullock y George Clooney, pero dada la complejidad técnica de la producción, sólo se filmaron sus rostros, y absolutamete todo lo demás fue generado digitalmente, logrando asombrosas imágenes totalmente creibles que hasta ahora sólo podría conocer un astronauta.
Igual que aquel slogan publicitario de "Alien", Alfonso Cuarón comienza su film con un texto que explica la falta de sonidos que existe en el espacio, y por lo tanto la banda sonora es una de las más extrañas, complicadas y brillantes de la historia del cine, con un dramatismo inusitado entre las conversaciones entre gente aislada en la inmensidad, con silencios sólo rotos por el inteligente score musical de Steven Price que acompaña las caminatas espaciales y las increíbles visiones de nuestro planeta con sutiles notas ambient, y recién introduce cierta épica en los momentos finales de mayor emotividad.
Cuarón cita visualmente muchos clásicos de ciencia-ficción, pero básicamente lo que vemos en "Gravedad" es tan original en lo estético como en el concepto de un film nada pretencioso, y en determinado punto logra que se lo vea no como una odisea cósmica, sino como una simple historia de supervivencia.
El desafío que intento y resolvió asombrosamente bien el director sería imposible sin la pericia técnica y estética de uno de los grandes directores de fotografías modernos, el muy premiado Emmanuel Lubezki, que por este trabajo superlativo debería tener un Oscar asegurado.
Por último, esta imperdible "Gravedad" tendrá pocos actores, pero sólo la mejor actuación en la carrera de Sandra Bullock justificaría el precio de la entrada.