Green Book: una amistad sin fronteras

Crítica de Isabel Croce - La Prensa

"El libro verde del conductor negro" era una guía de lugares que atendía sin problemas a los afroestadounidenses. Escrito por un cartero de Harlem, luego convertido en cronista y guía, fue de suma utilidad en la época en que la segregación en los Estados Unidos alcanzaba altos niveles. Se utilizó entre 1936 y 1967.

Este libro es el que usa Tony, un italoamericano que trabajaba como guardaespaldas en el hotel Copacabana. Lo hace en su nuevo empleo con un prestigioso músico negro que emprende una gira por el sur del país en 1962. Precisamente sobre la relación entre estos opuestos, un exquisito artista negro de formación superior, el doctor Shirley, y su guardaespaldas y chofer, rudo e intolerante, trata esta película, basada en hechos reales.

¿Amistad posible luego de un viaje de más de un año? El libro de Nick Vallelonga en que se inspira la película dice que sí. Los parientes del músico dicen que no. Vallelonga afirma que su padre le contó lo que se ve en la película, Shirley lo apoyó y ningún pariente del músico estaba allí; tampoco ninguno de los familiares. Y para más datos, ninguno figuró entre sus herederos.

DUPLA IMPECABLE
Con una fiel reconstrucción de lugares en que el músico realiza sus recitales, desde casas coloniales a hoteles y moteles en que la dupla debe alojarse, el filme evoca otro clásico del cine, "Conduciendo a Miss Daisy", en el que otros dos opuestos se enfrentaban: una señora sureña (Jessica Tandy) y un chofer negro interpretado por Morgan Freeman.

Real o no tan real, el choque de temperamentos y culturas en territorio sureño donde la ley del más fuerte estaba del lado de los segregacionistas, es una presión que se siente a lo largo de todo "El libro verde". Si la violación de los derechos humanos era una premisa en lugares en que osaba aparecer un negro, ahí está nuestro guardaespaldas y chofer estrella, Tony Lip, dispuesto a hacer entender que la libertad es sólo sentido común y debe ser respetada aunque sea a trompada limpia.
Road movie a través de los prejuicios sociales de la sociedad americana de los años "60, domados efímeramente por el arte, "El libro verde", que acumula cinco nominaciones para los Oscar, es una comedia con humor, surgida de esa pareja protagónica, la integrada por Tony y el doctor Shirley. 

Las interpretaciones de estos actores superan la química habitual y se enredan en una relación positiva para ambos. Por un lado, la élite, representada por los conocimientos del doctor Shirley, reconoce la autenticidad de un insulto bien dado por su ocasional compañero. En cuanto a éste, ajeno hasta entonces a cualquier manifestación artística, luego de una convivencia que va más allá de lo laboral, logra percibir, por primera vez, la emoción ante la ejecución musical.

Convencional a veces, poco verosímil otras (el intercambio de cartas con la esposa de Tony, la encantadora Linda Cardellini), el filme, más allá de cualquier traspié, permite apreciar la ductilidad de Mahershala Ali ("Luz de luna") y esa mezcla de calidez humana y socarronería que emparenta a Viggo Mortensen con Clint Eastwood. Una dupla impecable.