Pastillas verdes.
Si el espejo de este segundo opus del australiano Nash Edgerton es el cine de las primeras épocas de los hermanos Coen debemos decir de antemano que Gringo, se busca vivo o muerto no le llega ni siquiera a la punta de los tacos de Charlize Theron, actriz mal aprovechada en un rol fácil como la tabla del uno.
Sacándose este lastre, resta por decir que la originalidad del film consiste en la mezcla equilibrada de elementos de género que van de la comedia negra al policial narco con ciertas dosis de secundarios simpáticos, pero nunca bien escritos o al menos con carnadura o siquiera alguna profundidad de sus caricaturas.
No obstante, parece al menos posible un visionado de la cinta con carácter de entretenimiento y estructura coral para situarnos en el negocio de la venta de cannabis en una pastillita verde, que los norteamericanos producen en México dado que en EEUU deberían tener permiso.
Los trapitos sucios se producen afuera y el socio ideal es el trillado Cártel con jefe melómano y cabrón dispuesto a matar para conseguir la fórmula cuando los dueños del producto, ambiciosos y cabrones del norte, van con la orden de cortar la producción de la pastillita al organizar la fusión empresarial del laboratorio con nuevos socios capitalistas.
El empleado a sacrificar es un amigo del dueño, cornudo, afroamericano y muy servicial que se entera del plan mientras lo llevan engañado a México para terminar con la operación y dejarla operativa.
Todo se complica como es obvio, entran a tallar nuevos personajes con sub tramas paralelas y alguna que otra idea interesante levantan un poco una trama que parece compleja por sus vueltas de tuerca pero en realidad no le gana a ningún capítulo de la serie Breaking bad por citar lo más obvio en base a drogas, ambición, personajes extraños y violencia.
Por lo menos está Charlize Theron en plan Cruela de Viles dólares, el estereotipo narco presente y cierta mirada irónica sobre las bondades de ser norteamericano y ahondar superficialmente por temas importantes tras la era Trump.