Cuando Guardianes de la Galaxia se estrenó en 2014 fue una gran sorpresa. De la noche a la mañana un comic muy de nicho se hizo famoso y de repente miles de personas se emocionaron más por ver en acción a un árbol parlante (de una sola frase) y a un mapache, en lugar de héroes clásicos tales como Superman que había relanzado su franquicia un año antes.
Por ello hay que remarcar lo genial que fue ese film gracias al ingenio de James Gunn (aquí también dirige), quien venía del palo indie y sorprendió mucho al ponerse detrás de una superproducción.
Todo lo que vimos en la película original se encuentra aquí pero potenciado. O sea, hay más chistes, más acción y más espectáculo visual.
Pero además es uno de los casos en donde la “fórmula Marvel” (secuencia de acción cortada por chistes cada 5 minutos) funciona a la perfección porque los personajes se acoplan y los climas no se interrumpen. Las reglas ya son así.
En lo único que esta cinta no supera a su predecesora es en la originalidad y no por mal guión sino porque la primera contaba con el factor sorpresa que -obvio- una secuela no puede tener.
En cuanto a la historia, fluye mucho y deja bien satisfechas todas las dudas sembradas en la primera parte.
Otra cosa que me encantó fue el desarrollo de algunos personajes secundarios y las nuevas incorporaciones.
Yondu y Nebula son dos claros ejemplos de cómo se puede acaparar la atención del espectador con las segundas líneas sin descuidar al elenco principal.
¿Y Kurt Russell? Una referencia ochentosa en sí misma que está muy bien en su papel y cuyo personaje se encuentra en total sintonía con el resto aún con sus giros y sorpresas. No se puede decir más porque se trata de un spoiler.
Tampoco se puede ampliar mucho sobre la inclusión de Sylvester Stallone pero si decir que te deja con ganas de mucho más.
En cuanto a los guardianes propiamente dichos, todos excelentes y muy bien exprimidas algunas relaciones tal como Star Lord/Drax. Gran dupla de Chris Pratt y Dave Bautista.
Pratt tiene un carisma impresionante y es imposible no quererlo, ya sea en sus pasos de comedia o héroe de acción.
Y aquí llegamos a la parte en donde me toca hablar sobre Baby Groot y Rocket… Yo era de los que se quejaban por la versión bebé del árbol. Decía que era todo una movida de marketing por lo bien que habían pegado esos segundos en el film anterior y la venta de merchandising.
Si bien mantengo esa teoría, ahora digo que está explotada de forma brillante y la dupla con el mapache no puede ser mejor. Lograron lo que se propusieron: que quiera Funkos y peluches de ambos.
Por último la banda de sonido. Como no podía ser de otra manera los clásicos de los ochenta se apoderan de todo y cada tema muy bien puesto. Con el tiempo y más visionados del film (y escuchas al soundtrack) decidiré con que volumen me quedo para reproducir en cassette.
En definitiva, Guardianes de la Galaxia Vol. 2 es una fiesta absoluta con mucho fan service pero que incluye al público general. Marvel en su máxima expresión en un ámbito en el cual la fórmula no opaca la obra.