Una de las películas más divertidas y bizarras del Universo MARVEL. Una ópera espacial tan entretenida como kitsch en la sintonía del mejor FLASH GORDON. Escenarios grandilocuentes y coloridos, personajes variopintos, creíbles y sobre todo muy empaticos. Un filme inteligente que no se queda en los meros efectos especiales (que son asombrosos) sino que se apuntala en un guión elaborado y plagado de humor. Es sin dudas, el mejor y más osado filme de la factoría comandada por STAN LEE. Un espectáculo cinematográfico que debe ser disfrutado en pantalla gigante y en la oscuridad de una sala.