Hay custodios para un buen rato
Llega la primera parte de lo que promete ser una saga con bastante humor y desparpajo. Y con muchos personajes que traen la venganza grabada en sus ADN.
En el universo de los cómics hay personajes e historias más serios que otros. Guardianes de la galaxia, de Marvel, no tiene el status ni la popularidad previa de otros. No son celebridades.
Perdón. No eran celebridades.
Porque a partir del salto a la pantalla grande, este quinteto con mucho de los viajeros de la saga de La guerra de las galaxias -es inevitable la comparación, y no sólo porque el Episodio VII se esté rodando en estos momentos- van a ganarse un lugar en el Olimpo hollywoodense de las adaptaciones pochocleras.
Son renegados o bandidos, ladrones o aventureros, la mayoría con el chip de la venganza grabado en el ADN. Empezando por Peter Quil (Chris Pratt), un humano que, como abre la película en 1988, estaba fanatizado con la música ochentosa, es abducido por extraterrestres y convertido en saqueador intergaláctico.
En eso está él, y en eso estarán el mapache creado genéticamente Rocket (voz de Bradley Cooper), el Arbol Groot (voz de Vin Diesel que sólo dice "Yo soy Groot"), el forzudo Drax (Dave Bautista) y la verdolaga Gamora (Zoe Saldana): de aquí en más, los Guardianes de la galaxia.
Como todo filme presentación, y con tantos personajes, hace falta desandar un poco para conocerlos. Pero el quinteto aventurero no tiene nada que ver con la cofradía de los X-Men, por ejemplo. Y el tono humorístico que le imprime el director James Gunn -el de Super, sobre un extrañísimo superhéroe¨- es acorde. Los Guardianes de la galaxia mezclan parodia con humor bien simple, todo esto tamizado sobre una trama en que la amistad es el bien supremo.
Entonces, ¿nadie debería tomarse demasiado en serio nada de lo que se cuenta? No es para tanto. Todos, los buenos y los malos, empezando por Yondu (Michael Rooker, el alien que secuestró por algún motivo a Peter de niño) o Ronan, el malo más malvado, quieren esa gema por la que todos pelean, aunque peor se intuye que será Thanos (que tendrá mayor envergadura en filmes por venir -la secuela se anunció esta semana, será para 2017-, con la voz de Josh Brolin).
Y hay muchos más personajes dando vuelta, encarnados por John C. Reilly, Glenn Close, Benicio Del Toro y Djimon Hounsou. Hay mucho despliegue para llenar la pantalla.
Si a otra saga se acercan estos Guardianes... es a Piratas del Caribe. Hay acción, mucho humor, desparpajo y ganas de pasarla bien entre los personajes, y eso salta de la pantalla, se ve con o sin anteojos 3D. ¿Seguirá así?
Vamos viendo.