Una buena de zombies
Un sobrio y conservado en formol Brad Pitt es el principal responsable de salvar a la tierra de un ataque ultra caótico y apabullante de muertos vivientes, los cuales no hacen más que multiplicarse por todo el mundo cosechando un desorden infernal por donde se movilicen.
World War Z emerge como resucitando una temática que parece ya agotada y exprimida a más no poder y que ha sido cultivadora de muy pocas películas rescatables acerca de estas aturdidas criaturas. Y lo hace bien, sorprendentemente bien.
De movida y en apenas la segunda escena presenciamos una vorágine desenfrenada que deriva en una masa de gente huyendo despavoridamente, a la par de choques múltiples entre camiones, camionetas y autos que aceleran sus marchas de modo desordenado. Y dicha secuencia sumerge al espectador de lleno en el film: a partir de allí, la historia marcha por sí sola llevándonos siempre a buen puerto a través de momentos de suspenso, energía y elevados grados de rigidez.
El aplomo de Brad Pitt a base de una actuación sólida en donde sabe intercalar a la perfección fortaleza (para enfrentar las adversidades) y sensibilidad (en el trato hacia su familia) le otorga un plus de valor a esta entrega bañada de entusiasmo. Los pasajes de acción están elaborados de modo tan adrenalínico que es imposible perder la atención en lo que acontece; para asombro del público y si bien existe una importante cantidad de circunstancias en donde el ritmo y el desparramo de municiones se apoderan de la pantalla, no todo es guerra y explosiones en World War Z: algunas sorpresas narrativas y unos giros de buen thriller nos enlazan aún más cuando se muestra el lado orientado a la búsqueda de resoluciones que intenten hallar el punto débil de la perturbadora y amenazante presencia zombie.
Quizás falto de algunos condimentos gore pero apasionante e impactante visualmente, la película atrapa también en escenas en donde se adhieren a la receta ingredientes tales como terror y estados de tensión pura (como sucede en el laboratorio), resultando un producto que a pesar de pertenecer a un género encasillado como sólo para amantes de relatos de muertos vivos, supera las expectativas y termina agradando incluso a quienes nunca comulgaron con dicho rubro.
LO MEJOR: acción, suspenso, saltos, nerviosismo. Buenos recursos fílmicos. La actuación de Pitt.
LO PEOR: algo tímida en el aspecto sangriento.
PUNTAJE: 8,1