"Habi, la extranjera" es una película festivalera, en el buen sentido (no hay que tenerle miedo, espectador masivo!). Su recorrido internacional hacía sospechar un film cautivante y no defrauda, definitivamente. Una maravillosa postal de desconcierto, ansiedad y crecimiento, que se presenta como uno de los más sólidos exponentes del drama local de este año.
María Florencia Alvarez nos trae un film delicado, profundo y sensible. Presenta una historia bien contada, muy sutil y absolutamente amistosa. Habi,es un nombre transicional y prestado que toma una joven mujer de visita en la gran ciudad para jugar a ser otra persona...
Analía (quien será Habi la mayor parte del tiempo en la historia), llega a Buenos Aires con un recorrido armado (y un posible retorno rápido a su tierra) pero termina modificandolo, impulsivamente? para delinear un perfil distinto de sí misma, jugar otro rol, experimentar otra vida... y más, adentrarse en una cultura nueva, y explorar emociones y sentimientos nuevos.
Martina Juncadella (Habi) es la protagonista (ofrece una actuación memorable), joven mujer en tránsito, en plena etapa de ruptura y descubrimiento que despierta sus sentidos y quiere probar otra faceta de su personalidad...
El rebelarse, no siempre tiene que ser estridente. A veces, funciona de otra manera. A eso refiere Alvarez cuando caracteriza a Habi. Hay una firme decisión de la protagonista de no regresar a su tierra natal (al menos por un tiempo) y ver que le sucede si toma un camino impensado: elegirá reafirmar su ser cuando llegue el momento de decidir?.Este nuevo universo, será su elección natural o pesará más el peso de la tradición?
Con el marco del aprendizaje a una cultura fascinante, el film transita pausadamente un recorrido de sorpresas y ocultamientos.
Habi trandrá que vivir otra relación con la religión (se acercará al mundo musulmán) e insertarse en una comunidad que la atrae de una manera muy especial, no tan cerrada como podría fantasear.
El film tiene su propio tempo y desconcierta al principio, pero cuando nos sentimos amigos de Analía/Habi, todo avanza muy bien: la empatía con ella es total.
Alvarez plantea una película fresca, tierno y muy accesible. Habrá que ver cómo responde el público a la propuesta a la hora de su estreno comercial. Alejense de cualquier prejuicio porque "Habi, la extranjera" es un gran film.