“Halloween” es una película dirigida por David Gordon Green y escrita por él mismo junto a Danny McBride. La cinta está protagonizada por Nick Castle, Jamie Lee Curtis, Judy Greer, Miles Robbins, entre otros.
Jamie Lee Curtis regresa a su icónico personaje Laurie Strode, quien llega a la confrontación final con Michael Myers, la figura enmascarada que la ha perseguido desde que escapó de la matanza que él hizo la noche de Halloween hace cuatro décadas. Esta nueva entrega de “Halloween” será secuela directa de la original de 1978.
La historia no es tan difícil de entender y hasta quizás es poco innovadora, pero funciona al momento de darle ritmo y agilizar las situaciones presentes en el filme. Los instantes de suspenso y de máxima tensión, al igual que un par de sustos, están muy bien manejados. Hay otros que son bastante predecibles o que no provocan el impacto que deberían causar. Y no solamente en los sustos, sino que además hay determinadas escenas, generalmente habituales en este género de terror, que también son predecibles y hasta incluso muy poco necesarias, solo sirven para originar un buen asesinato para Michael Myers. Tampoco olvidemos los típicos actos donde los personajes toman decisiones completamente absurdas.
La película presenta un buen elenco, dentro del cual la que más se destaca es Jamie Lee Curtis y obviamente el personaje Michael Myers. Durante gran parte de la trama vemos cómo va evolucionando esa relación entre ambos, tanto de manera directa como indirecta, para llegar a esa confrontación final. Por otro lado, y lamentablemente hablando, hay algunos personajes muy mal utilizados en la cinta y que terminan siendo muy aburridos y sin nada interesante.
Otro punto fuerte que podemos ver en “Halloween” es la banda sonora icónica, que los mayores fans seguro recordarán de la primera parte de 1978, sencillamente espectacular. Las escenas que contienen mucha sangre y violencia explícita también están bien hechas; no hay sangre CGI volando como si fuera gelatina de frambuesa.
En resumen, “Halloween” logra lo que las anteriores 9 cintas de Michael Myers no pudieron ser, una digna secuela de “Halloween” de 1978.