La Fiesta Silenciosa sin dudas es de las mayores sorpresas de la última edición del Festival Internacional de Cine de Mar del Plata. La película de Diego Fried es un thriller que una vez que empieza nos va a dejar impactados hasta el último plano del film. La introducción a los personajes es corta y concisa, tenemos que saber lo necesario para adentrarnos en el contexto sobre lo que vamos a ver. El conflicto se presenta rápido y es ahí cuando La Fiesta Silenciosa se transforma en un frenesí que nos va a dejar los pelos de punta. Violenta, horrorosa y bastante sangrienta por momentos, La Fiesta Silenciosa no es parecido a ese cine B que muchos quizás estén acostumbrados de Hollywood, en donde se pueden encontrar tramas similares entre si salvo una resolución distinta. Por ende, esta película se diferencia de las demás por sus personajes, sobre todo el de Jazmín Stuart, que es el mejor del film. En este tipo de películas, la o el protagonista principal siempre tiene que tomar coraje y enfrentarse codo a codo con los problemas que se le van presentando en el camino. Pero con Stuart no es solo tomar coraje, sino demostrar que su personaje también puede entrar en el juego y ser mucho pero que los “antagonistas” del largometraje. Gerardo Romano y Esteban Bigliardi también se destacan bastante, sobre todo por estar en una gran mayoría de escenas juntos o acompañando a Jazmín. El resto del reparto tampoco decae, aunque hay algunas actuaciones que son mucho más creíbles que otras, ya que a fin de cuentas, estamos en un thriller de tensión constante. Entonces, esa ambientación que juega mucho con la trama, los personajes también potencian eso, otros más otros menos, realmente todos hacen un gran trabajo. Otra cosa que quiero felicitar es la utilización de la música en el film. Desde el inicio podemos suponer que gracias a lo que se oye de fondo, nos estamos metiendo poco a poco en algo mucho más que una fiesta previa a un casamiento y lograr unos “últimos preparativos”. En resumen, La Fiesta Silenciosa es un thriller que mantiene la tensión desde el principio hasta el final que además potencia a uno de los mejores clímax de los últimos años de este género en Argentina, y que gracias a su protagonista principal tenemos un magnifico uso de la violencia presente.
«Gretel & Hansel» es una nueva adaptación del cuento clásico de Wilhelm Grimm y Jacob Grimm, esta vez dirigido por Oz Perkins y escrito por Rob Hayes. Está protagonizado por Sophia Lillis, Ian Kenny, Charles Babalola, Alice Krige, entre otros. La propuesta que nos trae Oz dista bastante de lo que se suele ver últimamente en cuanto a adaptaciones y films originales del género de terror, es decir, que están plagadas de clichés y jumpscares por todas partes con tal de conseguir el susto fácil en el espectador. En cambio, en este largometraje tenemos algo más tétrico y medianamente psicodélico. Aún así, la trama es bastante sencilla y el hecho de que esté contada desde el punto de vista de Gretel (Sophia Lillis), logra que el film tenga un ritmo un poco más ligero y no se estanque tanto en determinados momentos. El problema es que nunca se llega a comprender el verdadero mensaje que quiere dejar el director en su cinta, generando cierta confusión en el público. Sobre las actuaciones, la más correcta es la de Sophia Lillis, logrando bastante bien las diversas expresiones de su personaje frente a las situaciones de máxima tensión dentro de la historia. De Hansel no podemos decir mucho ya que no parece tener tanto peso en la trama, a pesar de que participa en ciertas situaciones de mayor incidencia de la película como en el cuento. ¿Y la bruja? Alice Krige consigue una interpretación a medias para un personaje que podría haber dado más. A pesar de todas esas cuestiones, «Gretel & Hansel» se destaca bastante con su puesta en escena y toda la ambientación tétrica que posee de principio a fin. Y a pesar de que tiene una historia que suele no avanzar por momentos, la propuesta de Oz Perkins queda en un casi decente film más de fantasía que de terror/terror psicológico.
«Dolittle» es una película dirigida por Stephen Gaghan y escrita por Thomas Shepherd, Chris McKay y Stephen Gaghan. Está protagonizada por Robert Downey Jr., Tom Holland, Rami Malek, John Cena, Antonio Banderas, entre otros. Después de dos anteriores adaptaciones del famoso Doctor Dolittle, esta tercera parte está llena fantasía y aventura por todas partes. La trama es bastante sencilla, por ende la película se va a encargar al 100% de poner toda la carne al asador en cuanto a las aventuras que vivirán nuestros personajes. El problema central de todo esto es que hay muchas situaciones que pasan tan rápido que no nos da el tiempo a nosotros como espectadores para poder comprender cómo se conocen los personajes, cuáles son sus objetivos, su historia de origen, etc. Esto no solo logra que la audiencia se desconcentre sino que también uno se pierde al intentar retener toda la información posible. Y al tener todos estos problemas para la historia, los que más sufren son los personajes. El elenco de voces es maravilloso y los personajes llegan a ser un poco entrañables como para que tratemos de pasar por alto la rapidez con la que se cuentan los hechos. ¿Y Robert Downey Jr.? Tiene un papel que constantemente lo hace pasar vergüenza, logrando que este personaje no ayude en nada en ningún momento y sus gesticulaciones y diálogos sean muy monótonos. Pero así como tiene sus cosas malas, «Dolittle» tiene sus cosas buenas, esencialmente en el apartado técnico. La fotografía, los vestuarios, los efectos especiales y alguna que otra canción de la banda sonora logran sacar a flote, por momentos, al film. Incluso estos aspectos técnicos nos pueden llegar a resultar familiares de films live action de Walt Disney Pictures, así que si bien no son nada originales, están muy bien construidos, armados y realizados. En síntesis, «Dolittle» no llega a ser una película apta para todo público, ya que a los más grandes (e incluso capaz a adolescentes y algún que otro niño) les resultará sumamente irritable lo soso y tonto que es todo el contexto de la película, a pesar de algunas cosas buenas.
Al momento de hacer una película de comedia, más en estos tiempos, suele ser bastante complicado que un elenco no tan conocido pueda marcar la diferencia, salvo que haya un buen guión detrás. Entonces, en esta nueva película del director Andy Fickman, donde la gran mayoría del elenco ya es conocida, ¿funciona bien realmente? «Jugando con Fuego» no es nada nuevo, no tiene nada que no hayamos visto en otras películas o series de la misma índole con respecto a un papá o a una especie de figura paterna que tiene que encargarse de unos niños revoltosos pero que al final todos se terminan llevando bien y todos contentos. ¿Está bien planteado aún así esta cuestión? Sí, pero volvemos a remarcar que es algo sumamente cliché. La excesiva utilización de comedia también es un punto a debatir. Entendemos al 100% que no todos tenemos el mismo humor y que lo que para uno puede ser divertido, para el otro no. Aún así, dentro de tanto y tanto chiste siempre se logran obtener unas risas con unos cuantos diálogos o situaciones a lo largo del film. El único que no termina de entrar en sintonía con los demás del elenco es John Cena. Muy posiblemente, Cena quiera incursionar en el mundo del cine tal como lo han hecho sus otros compatriotas de la WWE, Dave Bautista y Dwayne Johnson. Pero momentáneamente todavía no ha logrado despegar. Quizás necesite un gran impulso en una película o franquicia de renombre, como «Fast and Furious» o «Suicide Squad», de la cual formará parte los siguientes 2 años. En cuanto al resto del elenco, todos funcionan muy bien y su química es excelente. En resumen, «Jugando con Fuego» presenta todos los clichés posibles y una comedia excesiva que tiene casi cualquier película o serie derivada de adultos que cuidan a niños traviesos a lo largo de una corta historia, llena de amor, amistad y mucho… fuego.
“Amor de Película” es una cinta protagonizada por Natalie Pérez, Nicolás Furtado, Guillermo Pfening, Vanesa Butera, entre otros. El film se estrena comercialmente este 7 de noviembre en nuestras salas argentinas. Tal como sucede con la gran mayoría de las comedias románticas, lo importante siempre es mostrar desde una perspectiva fílmica pero también real las segundas oportunidades, las primeras impresiones y la re-construcción del amor. Estos parámetros sin dudas los cumple la película de Mega Díaz. Por ende, caemos en la repetición y lo cliché de todas estas situaciones que ya sabemos cómo van a terminar, cómo van a suceder, quién terminará con quién, y así sucesivamente durante la hora y media de metraje. Y esto afecta tanto a la trama como a los personajes principales. Las personalidades de los intérpretes son simples, la trama es sencilla y sin vueltas, así que no tenemos por qué esperar mucho tampoco. Puede volverse densa, pero en sí, la historia es bastante ligera. Y posiblemente “Amor de Película” no se torna aburrida gracias al dúo protagónico de Furtado y Pérez. Por más romance que contenga un largometraje, si los protagonistas no tienen química y no demuestran ese amor, nos queda un producto audiovisual muy seco y carente de lógica. Pero aquí no sucede eso, realmente uno como espectador llega a sentir la impresionante química y trabajo que tienen tanto el personaje de Nico como el de Natalie. Sin dudas ellos dos se roban el show. Igual los roles secundarios no se quedan tan atrás. Si bien pueden sentirse muy innecesarios por momentos, las interpretaciones de Burtera y Pfening sirven bastante en momentos donde el espectador necesita relajar después de tanto melodrama y disfrutar un poco de la comedia que se nos presenta gracias a estos personajes. Lo demás, tanto la banda sonora como la ambientación típica comedia romántica están decentes. Pero en resumidas cuentas, “Amor de Película” se posiciona en la lista de típicas películas románticas que ya hemos visto y que aportan muy pocas cosas buenas, pero que llegan a rozar lo aceptable gracias a un elenco y sobre todo un dúo protagónico que saca adelante a la historia como puede.
“Los Locos Addams” es una película animada dirigida por Conrad Vernon y Greg Tiernan y escrita por Pamela Pettler y Matt Lieberman. El reparto de voces incluye a Oscar Isaac, Charlize Theron, Chloë Grace Moretz, Finn Wolfhard, Nick Kroll, entre otros. Con el pasar de los años, Los Locos Addams fueron medianamente “cayendo” en la popularidad geek y cinéfila. Y es entendible, con tanto cine de superhéroes y ciencia ficción, remakes, secuelas y spin-offs en las carteleras de todo el mundo semana a semana se puede comprender el motivo por el cual no se habla mucho de estos personajes hoy en día. Esta versión animada nos cuenta una “corta historia de orígenes” para la Familia Addams, pero más que nada nos muestra cómo se deben empezar a acostumbrar al hecho de que viven con seres humanos diferentes a ellos. Es por eso que suponemos que el objetivo detrás del film es empezar a atraer a más público y volver a captar la atención de las personas un poco más mayores que crecieron viendo las películas live action de estos personajes. ¿La película consigue eso? Sí, pero a medias. La trama se puede resumir en la aceptación de que ellos son diferentes a nosotros, pero eso está bien y hay que aprender a convivir con ello para tener paz entre todos. Un argumento que hoy en día es utilizado en muchas producciones y se está volviendo demasiado cliché. Pero fuera de eso, hay muchos momentos cómicos y referenciales que le otorgan estas cosas positivas a la cinta: el hecho de entretener y ser lo más divertida posible (aunque con algunos chistes bastante repetidos). Como mencionamos anteriormente, el ver cómo la Familia Addams, que no sale de su encierro, se enfrenta al mundo cotidiano en el que vivimos los espectadores actualmente también resultó un punto positivo y bastante fuerte, ya que en gran medida la trama también quiere manejarse por ese lado, y lo consigue de manera casi perfecta. La gran mayoría de personajes son muy simpáticos (obviamente los Locos Addams por delante de todos ellos) y hace que podamos conectarnos con ellos por momentos. De más está decir que la música original de estos personajes ha sido utilizada de una genial forma en los diferentes momentos donde hace presencia en la trama y le aporta ese grado de nostalgia claro y conciso, sin la necesidad de utilizarlo todo el tiempo para lograr ese fan service repetitivo y sin constancia certera. En resumen, “Los Locos Addams” es una pasable película animada de personajes míticos que aparentemente buscarán hacerse un hueco entre tanta nueva era de films y series que estamos viviendo hoy en día. Buena comedia, trama decente y personajes super divertidos, “Los Locos Addams” es una cinta que si no la tomas tan en serio, te va a entretener un rato.
“Soy Tóxico” es una película dirigida y co escrita por Pablo Parés y Daniel de la Vega, el otro guionista es Paulo Soria. Está protagonizada por Esteban Prol, Horacio Fontova, Sergio Podeley, Gastón Cocchiarale y Fini Boccino. “Soy Tóxico” es una película que entra en la categoría de cintas post-apocalípticas, donde, en este caso, una guerra bacteriológica convirtió no solo a Argentina sino a toda Sudamérica en un lugar lleno de gente infectada. La temática ya la hemos visto en muchas ocasiones, pero lo que se diferencia en esta oportunidad es el por qué y cómo se desarrolla cada historia. El film presenta una buena fotografía y ambientación, un poco diferente a lo que solemos ver en este tipo de cintas, toda esa utilización de colores un poco más grises y oscuros sirven y ayudan positivamente a cómo se aprecia la trama. Uno de los problemas que presenta la película es la tardanza que tiene en explicar ciertas situaciones y flashbacks que tienen algunos personajes, sobre todo con el protagonista. Más allá de que tan solo dura algo más de 70 minutos, algunas cuestiones son respondidas un poco tarde y en momentos innecesarios. En cuanto a los personajes, no están muy profundizados algunos de ellos, pero la atención se centra más en dos papeles en particular, con una relación que se revelará de forma bastante impactante y que tiene un buen desarrollo. El maquillaje de los infectados y los pocos efectos especiales dentro de la cinta están bastante bien logrados, aunque por momento no se llega a diferenciar o notar ciertas cosas. En resumen, “Soy Tóxico” no es una mega producción de película post-apocalíptica, pero es notorio que la cinta busca otro rumbo, ligado más a las relaciones y revelaciones que pueden llevarte a la locura misma en situaciones extremas.
“Playmobil: La película” es una película francesa dirigida por Lino DiSalvo y escrita por Blaise Hemingway, Greg Erb y Jason Oremland. La película llega este 10 de octubre a los cines argentinos. Cuando se anunció que habría una película sobre LEGO, la mayoría de los cinéfilos y espectadores pensaron que esto solo era otra mala idea. Curiosamente, “La Gran Aventura LEGO” terminó siendo un gran éxito crítico, taquillero y un buen producto para las audiencias. Con la cinta de PlayMobil sucedió lo mismo, salvo que ahora no hay necesidad de argumentar tanto porque el film fracasa. La cuestión de la mala nota sobre “Playmobil: La Película” no es necesariamente por el famoso juguete Playmobil en sí, sino porque su largometraje no innova, no muestra nada que no hayamos visto ya en las películas de LEGO. Esta película solo trató de copiar el modelo de éxito de la primera de LEGO y, sinceramente, no funciona. Las actuaciones son muy planas, no transmiten lo que deberían cuando pasan por distintas sensaciones como felicidad, angustia, curiosidad, etc. Los chistes, situaciones y referencias de la película, aunque no lo crean, están más enfocados en el público adulto, son muy clichés y muy pocos terminan ser divertidos. Para los nenes chiquitos sí puede funcionar, pero lamentablemente no hay nada nuevo que ofrecer. La trama de la película es una constante montaña rusa en cuanto a la narración de todo lo que está pasando durante 90 minutos. Un primer acto demasiado exagerado y hecho a las apuradas para introducirnos de lleno en el segundo acto, que logra ser el más decente de todos, tomándose los tiempos necesarios para explicar todo el contexto; para luego terminar con una resolución demasiada rápida y dejando los mensajes de “amor, amistad y unión en la familia” que no conectan con el espectador. Párrafo aparte para hablar sobre los números musicales que presenta el film. No funcionan y no son pegadizos, tal como sucede en las películas de LEGO, salvo una sola canción: “Todo es Increíble”. En resumen, “Playmobil: La Película” funciona a medias como un producto de entretenimiento para los más pequeños y directamente no arranca para el disfrute de los adultos.
“Muere, mounstro, muere” es una película escrita y dirigida por Alejandro Fadel. Está protagonizada por Víctor López, Esteban Bigliardi, Tania Casciani, Romina Iniesta y Jorge Prado. La historia que nos trae el director nos muestra algún lugar cerca de la cordillera mendocina donde suceden una serie de asesinatos de mujeres que aparecen decapitadas. Entonces, la policía investigará los casos hasta encontrarse con algo mucho más oscuro y aterrador de lo que pueden imaginar. En “Muere, monstruo, muere” tenemos no solo la problemática de las mujeres asesinadas, sino que también hay presentes otras cuestiones como una especie de triángulo amoroso que no está tan bien desarrollado y el foco de atención del monstruo, que tampoco termina teniendo un origen y una profundización correcta. Pero lo principal, está presente. En cuanto a los personajes, todos tienen química entre ellos y las mejores escenas, ya sean de terror, comedia o suspenso, se potencian positivamente cuando están todos los actores juntos. Las mejores interpretaciones son de Cruz, interpretado por Victor Lopez y David, interpretado por Esteban Bigliardi. La gran mayoría de momentos cómicos que tienen algunos personajes, sobre todo Jorge Prado, funcionan muy bien. En cuanto a los aspectos técnicos, resultan ser lo mejor de la película. El monstruo está bien hecho y con poco CGI; los escenarios y la ambientación se ven muy bien gracias a los planos generales bien utilizados para ver y apreciar el contexto de la historia. En resumen, si bien “Muere, monstruo, muere” presenta varios baches en la trama y subtramas presentes, logra salir a flote con la ayuda de sus buenos momentos de humor y aspectos técnicos realmente bien logrados.
“Maligno” es una película dirigida por Nicholas McCarthy y escrita por Jeff Buhler. Está protagonizada por Taylor Schilling, Brittany Allen, Jackson Robert Scott, Colm Feore,entre otros. Un alma maldita que trata de apoderarse de un alma buena e inocente para realizar actos malignos (nunca mejor dicho) y matar a quienes quiera. Lo hemos visto muchas veces ya, y “Maligno” se une a la lista de las que no funcionan. No sabemos muy bien en qué momento terminará la época de películas repetitivas y temáticas similares, que además están mal estructuradas y contadas. “Maligno” no es una cinta de terror, trata de rozar el género de misterio y thriller que por momentos logra y por muchos otros no. Hay tan solo un susto bueno en la película. Conocemos el problema, conocemos a nuestra víctima y conocemos a todos los que se involucrarán de manera directa o indirecta para salvar al protagonista. Hay bastantes situaciones predecibles y el film se vuelve bastante aburrido por momentos. Las actuaciones aún así son bastante correctas, por más que los personajes caigan en clichés. El que más se destaca es el pequeño protagonista, Jackson Robert Scott, quien se luce en varios momentos. Los demás son bastante predecibles, planos y sin mucha importancia con el correr de los minutos. Si bien no termina siendo una cinta de terror, por momentos hay una fotografía y una ambientación bastante interesante y que se apega a las características de este género anteriormente mencionado, pero son pequeños momentos. En resumen, “Maligno” trata de ser diferente a lo que se está viendo los últimos años y termina siendo casi decente, casi.