No sabría decir cómo empezó esta moda, si fue Tim Burton en los ’90 con su estilo de cuento de hadas dark; si fue aquella sub valorada "Los Hermanos Grimm" de Terry William, la olvidable "Van Helsing" de Stephen Sommers, o la burlona de "Shrek" y las que le siguieron/imitaron; lo cierto es que hace un par de años Hollywood adoptó una moda que puede resultarle en taquilla, pero pocos resultados “artísticos” le ha traído.
Adaptar los tradicionales cuentos infantiles que traspasaron de generación en generación desde hace siglos, a lo que se considera una visión adulta de los mismos... pero entendiéndose esto por recargar las tintas de la violencia, complejizar (supuestamente, en verdad la banalizan) la trama, quitarle la inocencia – fundamental en la fórmula – y agregarle un cierto contenido sexual o de pérdida de lo virginal. El pretexto es que, presumiblemente, en su origen estos cuentos fueron pensados para un público mayor, o que contenían otros mensajes o moralejas y con el tiempo se fueron “suavizando”. Cierto esto o no, dudo que en el Siglo XIX tuviesen la mirada “desangelada” que tienen hoy estos vacios productos Hollywoodenses.
?Entonces, del mismo lugar de donde salieron "La chica de la Capa Roja", "Espejito-Espejito" (aunque esta guardaba cierto espíritu infantil), "Blancanieves y el Cazador", y en menor medida la serie de TV "Once Upon A Time", llega ahora "Hansel y Gretel: Cazador de Brujas"; y como era de esperarse, el resultado es el mismo que en los anteriores (con la excepción de Once... que guarda ciertos atractivos aparte), la nada misma.
A modo introductorio al principio se nos muestra a los pequeños Hansel y Gretel que son seducidos por una casa de dulces en donde los aguarda una bruja; como si nasda, estos se avispan más temprano que tarde y la cocinan; como un breve repaso frio y a las apuradas de lo que era el cuento. Rapidito pasamos a Hansel (Jeremy Renner) y Gretel (Gemma Attterton) ya mayorcitos y que, como se ve que les gustó el asunto de hornear damas malévolas, ahora se dedican a ir pueblo por pueblo cazándolas, como una suerte de cazarecompensas medievales pero high-tech. Pero claro, así como las cucarachas se van haciendo inmunes a los insecticidas, los hermanitos se cruzan con una bruja, Muriel, que evolucionó para hacerse inmune al fuego, y anda haciendo estragos con los niños de un pueblo; ah, la bruja tiene el bonito rostro de Famke Janssen.
El director es el noruego Tommy Wirkola que viene de pegarla con "Dead Snow", un film sobre uno zombies nazis invadiendo un campamento militar; y hay que decirlo, por lo menos pudo respetarse a sí mismo (algo no muy usual cuando Hollywood chupa). "Hansel & Gretel" no tiene medias tintas, el film es salvaje, terrible, aún más que el film asiático estrenado el año pasado; y la utilización del 3D sí, es con el fin de lanzar miembros y partes humanas a cámara. No es de aventuras, es una película de terror, y aunque hay producción mantiene una suerte de espíritu clase B.
Para dejar las cosas bien en claro en cuanto al tema de que no es cosa de niños, se le agrega una historia sexual, un presunto incesto, y un pasado tumultuoso.
Los protagonistas, incluidos Jannsen y Peter Stormare que da vueltas por el elenco como un sheriff que se opone a los hermanos; tienen un interesante currículo de buenas interpretaciones, pero acá andan sueltos por la historia; los hermanos no tienen química ni fraternal ni sexual, Famke no asusta a nadie, y Stormare actúa como pensando en la próxima película que tiene que filmar... más allá de que nadie creeria que alguien del elenco es realmente alemán.
Visualmente es llamativa, y tiene de bueno que es corta y entretiene a los que buscan acción. Pero sería bueno haberle cambiado el nombre a los protagonistas y que simplemente se llamase Cazadores de Brujas.