Hermanos esta inspirada en una película llamada Brode de origen danés que lamentablemente no pude ver la versión original y es por esto que no voy a poder brindarles una comparación sobre cuál de las dos es superior. Lo que si puedo afirmar es que el laburo de Jim Sheridan fue bastante bueno al darle un gran dramátismo a esta conflictiva historia familiar, aún si copió tal cuál la cinta del 2004, como muchos críticos han aseverado sin dudarlo en sus reseñas.
Brothers cuenta la historia de dos hermanos totalmente distintos que andan por caminos opuestos en la vida, pero cuando uno de ellos se lo da por muerto los roles cambian sustancialmente. Tobey Maguire interpreta al hermano militar, que es un ejemplo para cualquiera de nosotros. En la primer hora es buen padre, buen marine, buen amigo y es en esta primer parte cuando el actor de Spiderman no me termino de convencer. Jake Gyllenhaal lleva adelante con toda esa cara de bueno, al hermano problemático con mucha credibilidad y realismo a lo largo de toda la cinta. Natalie Portman es la más destacable de los tres protagonistas y aunque es jovén para ser madre de dos hijas, esto no es un inconveniente para ella logrando una actuación dotada por un dolor y dramátismo realmente excelentes. Volviendo a Tobey, la mejor expresión de su papel se puede ver cuando el film da un vuelco, con la vuelta de él a su hogar.
Hay dos momentos puntuales que son dignos de destacar por la tensión que tuvieron. El primero es la cena familiar en el cumpleaños de la hija menor, cuando los gestos y caras tanto de Sam como de la hija Isabelle son muy buenas. La otra gran escena es cuando Sam pelea con Grace en la cocina y se lleva adelante el mayor conflicto de la cinta del cuál no voy a dar más detalles para no revelar la mejor parte de la película, pero si les voy a contar que es allí cuando Maguire realiza una tarea descomunal llevando al límite su personaje.
Como conclusión Hermanos es un muy buen drama, potenciado por las grandes actuaciones de sus tres protagonistas.