En el reemplazo de una joven por otra y un viaje a Nueva York, Matías Piñeiro vuelve a jugar con el cine, Shakespeare, y con la posibilidad de trasladar su obsesión por la traducción al extremo.
Un regalo que no termina por concretarse, un viejo amor que aparece en forma de olvido y palabras que van y vienen, son sólo algunas de las guias para comprender la propuesta.