La inglesa Emerald Fennell, actriz y guionista, responsable de la escritura de varios capítulos de «Killing Eve», hace su debut tras las cámaras con este thriller que dio bastante que hablar el año pasado y que nos deja buenas sensaciones sobre el futuro de esta joven directora.
«Promising Young Woman» tuvo su preestreno en el pasado Festival de Sundance y desde entonces fue generando una fuerte repercusión de cara a la próxima temporada de premios al mismo tiempo que fue ocasionando cierto revuelo mediante su incorrección política así como también sobre su acertada critica social. Y es que el film de Fennell se desenvuelve con solvencia y pericia narrativa en un terreno bastante certero y paradójico a la vez. El film se presenta con inteligencia como una especie de comedia negra, revenge thriller y drama familiar que va cambiando de tono con agudeza e ingenio según lo va requiriendo el propio relato.
El largometraje se centra en Cassie (una tremenda Carey Mulligan), una joven treintañera que tenía un futuro prominente por delante, pero, por un incidente que desconocemos, decidió dejar su carrera como profesional de la salud y volver a vivir con sus padres mientras pasa los días trabajando en un bar y las noches acudiendo a clubes nocturnos. Se la pasa frecuentando los bares o discotecas de moda y finge estar borracha para llamar la atención de los hombres con malas intenciones e irse a sus casas para darles un «mensaje» o una «lección». Estos actos de venganza o «justicia por mano propia» parecen querer llenar un vacío inmenso que poco a poco se irá revelando con sutileza.
La película logra ser un relato formidable que, a su manera por momentos cuestionable y por momentos perspicaz y empática, busca poner sobre la mesa temas bastante actuales, como el movimiento #metoo, el abuso sexual, el empoderamiento femenino y cómo las autoridades nunca le creen a buenas o primeras a las víctimas y terminan favoreciendo o encubriendo a los victimarios. Resulta realmente interesante cómo este film se desenvuelve a medio camino entre films del estilo de «Hard Candy» (2005) y «Death Wish» (1974) con sus costados más controversiales que ponen en jaque la falta de acción de las autoridades, pero llevándolo más hacia un costado de denuncia mediante grandes dosis de humor negro.
Probablemente la película tenga tantos defensores como detractores. Lo cierto es que la autora logra tratar un tema delicado sin banalizarlo y entretener al mismo tiempo que busca generar consciencia sobre la violencia de género. Una misión que sería caminar por la cornisa para cualquier director/a debutante, pero de la cual Fennell sale airosa. El guion es uno de los puntos altos del relato, incluso cuando hay momentos que puedan ser anticipables. Igualmente, la obra logra generar climas de tensión avasallantes incluso cuando estamos ante eventos esperables debido a la crudeza con la que se presentan las tan comunes y nefastas faltas. Todo esto no hubiera sido posible sin la superlativa interpretación de Mulligan («Drive», «Never Let Me Go») que se demuestra totalmente comprometida con el rol de esta vengadora feminista.
«Promising Young Woman» es una película tremenda, audaz y completamente relevante. Un film por momentos retorcido, por otros políticamente incorrecto que además de ser una experiencia audiovisual impactante (visualmente es muy atractiva también) nos introduce a una autora con un futuro bastante interesante.