Indudablemente es difícil despegar esta naciente saga de “Twilight”... Dentro del universo de la literatura teen, se buscan nuevos productos para exportar al mundo del cine ahora que Bella y Edward se ha ido y para bien. Amores supernaturales se necesitan para entretener a la audiencia y ahora es el turno de apostar por “Beautiful creatures”, bandera de largada de una serie de cuatro libros,“The Caster Chronicles”, escritos por Kami García y Margaret Stohl (todo queda en familia no?).
De más está decir que la industria apuesta fuerte a esta propuesta aunque, su ariete inicial está lejos de lo artísticamente auspicioso, aunque a su favor es superior a lo último del género, sin dudas.
Hay que reconocerle al hombre detrás de las cámaras, Richard LaGravenese (“The fisher king” -esencial para mí allá por 1991- y la lacrimógena y olvidable “P.S. I love you”), que hizo una adaptación digerible de la primera novela (la escribió él). El universo de la obra está planteado más que aceptablemente y si bien hay elementos que caen con respecto al libro, la conexión funciona bien y el espectador se ubica rápido en tema.
La vida en la Alabama rural, es difícil. Más, cuando en ese lugar, la vida es rutinaria y el hecho más divertido es recrear el aniversario de una batalla de la guerra de Cesesión, una vez por año. Eso sí, será aburrido, pero no crean que no hay secretos en él...La cuestión es que a esta páramo llega Lena (Alice Englert), una oscura y culta adolescente que pronto se transforma en el centro de las miradas del pueblito: su familia está emparentada con la brujería y sus compañeros de la escuela reaccionan mal con su arribo (y razones no les faltan)...
Excepto Ethan (Alden Ehrenreich), quien es un atleta y simpático (simple, muy básico), chico del lugar, quien sabe que su vida está condenada al ostracismo si no hace algo para salir de ahí. Y Lena, llega en el momento justo: cómo no enamorarse de alguien tan distinto a uno cuando las ansias son romper las reglas?
Lena está próxima a transformarse en una bruja (bueno, “Caster”) de calibre. Fue llevada allí por su tío (Jeremy Irons) y está siendo custodiada por su particular familia. Tiene poderes que crecen en ella y le cuesta controlarlos. Ehtan es un simple muggle, así que si bien le cuesta llegar a Lena, lo cierto es que ofrecen el clásico equilibrio para una historia de amor más bien clásica...
Así es que Lena deberá decidir en un tiempo que lado (el bueno o el malo) será el que la reciba en sus filas mientras su amado mortal, luchará por acompañarla en la odisea. En ese camino, veremos algunos secundarios interesantes (Emma Thompson, un poco fuera de registro; Viola Davis, fantástica) que se ofrecen como rivales y aliados, en luchas dialécticas y físicas que preferimos no adelantar.
Si, “Beautiful creatures” no va más lejos de lo que propone. A pesar de contar con un cast lujoso y tomarse el tiempo necesario para desarrollar su historia, nunca logra atrapar al espectador por completo. Logra, parcialmente, empatía con la pareja. No es un film que cobra vuelo ni sacude la butaca, no. Si, hay que reconocerle que cuenta su historia prolijamente y que tiene alguna secuencia simpática, más allá de que Lena y Ethan no tengan la química esperada. En el debe, también hay que decir que la resolución de la historia (sobre todo después de más de dos horas de proyección) podría haber sido mejor trabajada, ya que después de tan paciente construcción, nos queda débil y demasiado previsible.
Si buscan entretenimiento y romance, quizás “Beautiful creatures” pueda serles un producto atractivo. Bajo la lupa del análisis minucioso, tiene sus falencias. Hay que saber que los fans de “Crepúsculo” (y similares) se sentirán cómodos con el relato pero el público más exigente no saldrá de sala conforme.