Un emotivo documental realizado por Miguel Monforte que sigue el itinerario de vida de Rodolfo Aro, un ex combatiente en Malvinas, que cuenta su experiencia en el conflicto, que detalla como fue su regreso a su Mercedes natal, el recuentro con familia y vecinos y luego como se relaciona con asociaciones de ex combatientes y como llega a la cruzada emotiva, incansable y ahora hecha realidad, de lograr que se identifiquen los cuerpos de los soldados argentinos enterrados en las islas, con la frase “soldado argentino solo conocido por dios”. Ese itinerario, con la creación de la fundación “No me olvides” y la enorme labor humanitaria. No solo la concreción de su objetivo, sino el trabajo minucioso de contactarse con los familiares, con los papas de los soldados muertos, lograr su consentimiento para la extracción de sangre, contenerlos y por fin detallar lo empeñoso y azaroso que fue hacer su sueño realidad. Un material valioso, emotivo, que nos obliga revisar todo lo que ocurrió, sus circunstancias y por sobre todo combatir el olvido de esos jovencitos que dejaron sus vidas en el irrenunciable suelo argentino. Pero también un trabajo que permite la reflexión sobre la inutilidad de las guerras, el costo humano, y lo peor: el desinterés sobre el tema.