Las tensiones entre las clases y los géneros, lo nacional e internacional, lo popular y lo formal, el color y el blanco y negro, lo figurativo y lo abstracto reviven la eterna discusión entre opuestos que los imaginarios cronopios y famas representan. Los cuentos fantásticos con que Julio Cortázar describió la realidad son recreados en un divertido collage cinematográfico dibujado por grandes pintores argentinos: Alonso, Bonta, Crist, Espósito, Noé, Pagano, Sáez, Santoro, Seguí y Tarsia. Cada uno aportando su maestría artística y propio estilo, apoyados por las más avanzadas técnicas de libre animación.