OTRO QUE SUFRE MUCHO
Hospital de New Orleans, horas antes de la llegada del arrasador Katrina. Matrimonio joven, un parto que se adelanta unas semanas, una madre que muere en el quirófano y una beba que sobrevive con asistencia mecánica en un hospital sin luz ni agua. Un padre desesperado que debe hacerse cargo de esa hijita en medio de la catástrofe. Uno de esos films donde el sufrimiento no da tregua. Golpea por todos lados como esa tempestad de viento y agua que pareció llevarse todo. Película póstuma del actor Paul Walker que murió en un accidente hace dos meses. El es el padre abnegado que encuentra en ese sacrificio el mejor homenaje a esa madre que ya no está. El avance feroz del agua (algo que los platenses conocen demasiado) le agrega más furia a un film que sólo encuentra algo de alivio en el llanto final de la nena.