Un hotel para visitar en familia y pasarla muy bien
Si nos ponemos a buscar en la historia del cine cuantas películas (de terror, comedias o parodias) se hicieron con Drácula, Frankenstein, hombres Lobos y otros monstruos como protagonistas, podríamos estar horas y horas nombrándolas. Era muy difícil tratar de encontrar alguna que fuera lo suficientemente original y que la pudiera ver toda la familia.
Es por esto que “Hotel Transylvania” tiene más de un mérito. El film cuenta la historia de Drácula que, luego de hacer unas cuantas décadas de haber enviudado, decide hacer un hotel cinco estrellas para que todos los monstruos puedan disfrutar tranquilos y con la seguridad que nunca entrara ese personaje tan siniestro y que tanto miedo les provoca a todos ello. Allí nunca entraría un humano. Drácula prepara en el hotel una gran fiesta para su adolescente hija de 118 años. Pero algo sucederá y, por equivocación, alguien está por llegar.
Una historia donde se dan vuelta los papeles y los humanos son los que dan miedo, junto con una catarata de gags sobre las películas de monstruos hacen de este film un verdadero divertimento que disfrutan todos, los grandes y los chicos. Este es uno de los puntos más altos que tiene a favor este film, y que varias películas desde Shrek viene realizando, la inclusión de guiños para los grandes, con la ventaja que en “Hotel Transylvania” también divierten a los chicos.
“Hotel Transylvania” es un lugar para no dejar de ir en familia y pasarla fantásticamente bien.