Argentina 1880-1930. Cada día desembarcan en el puerto de Buenos Aires cientos de inmigrantes provenientes de Europa. En este contexto, un grupo de proxenetas judíos-polacos deciden instalarse en el país y tras la fachada de la “Asociación de Socorros Mutuos Varsovia” (luego llamada Zwi Migdal) consolidan una red eficaz para traficar mujeres desde Polonia e introducirlas en su amplia red de prostíbulos.
La comunidad judía local, indignada con la sobreexposición de los traficantes, reacciona y los expulsa de la comunidad bautizándolos como “impuros”. Pero en ese camino la historia de las mujeres traficadas desaparece.
Sonia Sánchez, escritora y militante contra la trata de personas, reconstruye a través de la memoria escrita de las mujeres prostituidas esta historia que fue silenciada por más de 100 años.