Los dioses tenían su talón de Aquiles. Por eso el mismísimo Zeus, junto a algunos de sus hijos, como Poseidón y Atenea, abandonan el Olimpo para hacerse cargo de la situación. También cuentan con Teseo, que lucha contra Hyperion en el monte Tártaro, es decir en el mismísimo infierno. Con una relectura ingeniosa de los mitos y deidades de la cultura clásica, “Los inmortales” va construyendo un relato ágil y articulado en torno al héroe cuya cualidad le es revelada por el destino, un humano escéptico, pero noble y valiente. El filme, de los mismos productores de “300” es en su mayor parte producto de imágenes digitales muy bien resueltas y con el añadido del uso inteligente del 3D, en el que la mitología desata sus poderes y revela sus debilidades.