Invasión Zombie: Corea Style.
Podemos discutir si los zombies tendrían que ser rápidos o no. En esta película son rápidos, letales y despiadados. Se asemejan a los que presentan películas como 28 Days Later y World War Z. Incluso los amantes de la franquicia de videojuegos Left 4 Dead se van a sentir muy a gusto.
Invasión Zombie (Busanhaeng, en su título original; Train to Busan, en su traducción al inglés) no es una película perfecta, pero sí una de las más creativas que el género presentó en el último tiempo. Hay escenas muy artísticas que son magia pura, y situaciones dentro del tren que generan una mezcla de nervios y excitación.
Los zombies en sí tienen características novedosas que no había visto en otras historias de este tipo (aunque comentarlas sería entrar en terreno de spoilers).
El inicio del fin:
invasion zombieEsta producción coreana tiene éxito donde Fear the Walking Dead falló de forma miserable: explica con frescura y habilidad cómo una pandemia de este tipo puede expandirse tan rápidamente.
Y continuando con la analogía de la franquicia de zombies más famosa en la actualidad: mientras que The Walking Dead logró hacer que un apocalipsis zombie sea casi “cool”, con sexo, grandes historias de amor, armas y batallas épicas, en Invasión Zombie la cosa no es tan glamorosa. Se siente el drama, el brutal instinto por sobrevivir (y lo que nos lleva a hacer) y la resignación.
Me gustó mucho que los personajes y toda la situación sean tan realistas. No hay grandes héroes, no aprenden a matar zombies en el transcurso de un par de horas, y tienen que utilizar su ingenio para zafar de situaciones imposibles. Ninguno está a salvo en aquel infierno, y es devastador cuando les cae la ficha de que, probablemente, todos sus seres queridos están muertos.
En las escenas donde los protagonistas buscan llegar de uno de los vagones del tren hacia otro – siendo que todos los que están en el medio están atestados de zombies– se dan algunas de las escenas de suspenso y acción más logradas de este año.
Snowpiercer con zombies:
Quienes hayan visto Snowpiercer, la interesante película coreana del 2013 con Chris Evans, quizás encuentren cierto paralelismo en algunas temáticas que se tratan.
En primer lugar, ambas ocurren en un tren en movimiento. Invasión Zombie también explora las relaciones humanas ante una catástrofe mundial y contiene una especie de comentario social (las clases altas quedan varadas en los vagones de más adelante), si bien no profundiza demasiado.
El subtexto, el melodrama generado y las actuaciones no son el punto fuerte de la película. Hay diálogos bastante malos –eso no puede negar– y, si bien algunos personajes están verdaderamente muy bien (destacable el trabajo de la chiquita Su-an, por ejemplo), la mayoría de las actuaciones son exageradas e inferiores.
Esto no hizo que dejara de disfrutar el enorme espectáculo visual que presenta la historia, aunque sí lo deja a uno pensando que podrían haberse ajustado algunas cosas. El cine coreano es, (históricamente) melodramático, y para quienes siguen ese cine es hasta bien recibido. En mi caso, me pareció que habría funcionado un poco mejor de no ser tan obvia con los personajes típicos y unidimensionales y mejorando un poquito los diálogos.
Conclusión:
Más allá de algunas imperfecciones, Invasión Zombie no deja de ser una de las producciones más creativas, fantásticas e impresionantes que el género brindó en los últimos años. Me encantaron la cantidad de ideas diferentes que aporta, la acción desenfrenada y el entretenimiento que brinda. Incorpora mucha chispa a las cintas de zombies y es, sin duda, recomendable para fans de este tipo de relatos.