Michael King no cree en Dios o el Diablo. Cuando muere su esposa repentinamente, decide que su próxima película destinada a investigar sucesos supernaturales debería centrar el experimento en él mismo. Así, convoca a demonólogos y practicantes a experimentar con él y utilizar los más oscuros hechizos y rituales para despertar las fuerzas oscuras que puedan llegar a encontrar en él.