EL GRAN ROBERT DOWNEY JR
Secuela, una de las palabras más misteriosas, humilladas, reiteradas y bastardeadas del séptimo arte. Es verdad que muchas segundas partes no fueron “buenas”, pero no nos olvidemos que, pese a que sean pocas, existen secuelas que fueron equitativas con su antecesora y en muchas oportunidades hasta superiores, “El Señor de los Anillos: Las dos Torres”; “El Padrino 2?; “Terminator 2?; “Star Wars: El Imperio Contraataca”; “El Caballero Oscuro”; “Toy Story 2?; “Aliens” y algunas otras forman parte de esa categoría. En esta oportunidad, “Iron Man 2? es una cinta regular en su desarrollo, inferior a la original, pero que forma parte de lo mejor que ha realizado Marvel en los últimos años.
El mundo sabe que Tony Stark es Iron Man. Inmenso en una esfera de egoísmo y autosatisfacción, Tony debe enfrentarse a un nuevo villano que quiere cobrar venganza por sucesos pasados, pero también tendrá que combatir con un hombre mucho más fuerte y difícil: él mismo.
Iron Man es el superhéroe más cool que el cine nos pudo brindar, es ganador, confiado, tiene una luz que lo destaca en todas las reuniones y eventos, en su cumpleaños él es su propio DJ, le importa poco el qué dirán y tiene dos bellas mujeres que lo acompañan a todos lados. Pero es en esta película donde se muestra el lado humano de este héroe, la avaricia que lo carcome por dentro, el deseo de poseer todo y un egoísmo molesto, lo convierten en una persona más, que trata de ocultarse bajo su uniforme metálico. Es allí donde interviene una de las características más destacadas de esta película: Robert Downey Jr. Este actor ES Tony, ES un superhéroe actuando y ES uno de los pocos salvatajes que tiene la cinta. Gracia, humanidad, un carisma impresionante y un desarrollo único, hacen de su interpretación otra de las tantas para el recuerdo.
En el elenco también se encuentra Mickey Rourke, el nuevo villano de la cinta. Él está muy bien en su personaje, el trabajo realizado con el acento y cada una de sus expresiones malditas que generan el clima justo de maldad y venganza, están muy bien logradas. Scarlett Johansson, en el papel de La Viuda Negra, está correcta, seductora y hermosa, pero a la vez ruda y combatiente, tal como los escritos originales la pincelaron. Gwyneth Paltrow (Pepper), está muy bien, su actuación mantiene el mismo grado de satisfacción y autoridad de la primera parte. Don Cheadle (Rhodey), está bien, pero es el más flojo del elenco en algunos discursos orales y Samuel L. Jackson (Nick Furry), aparece poco pero satisface.
Pese a que las actuaciones son buenas hay un gran problema que involucra a dichos personajes. El guión está algo desordenado en algunas partes y hay situaciones y roles que están desaprovechados, teniendo en cuenta la importancia que los mismos tienen en el comic. Es por eso que la viuda negra no se convierte en algo trascendente, ella dice unas pocas palabras, se la ve en su apretado traje negro, pero en ningún momento se profundiza en su historia y en los motivos que decidieron llevarla junto a Tony. Esto mismo sucede con el gran villano, Ivan Vanko, que comienza muy bien, se desarrolla muy correctamente, pero es rematado de una manera muy sencilla y torpe teniendo en cuenta la evolución y cada uno de los planes que este había preparado. Es por eso que la historia entra en una laguna cerca de la mitad de la duración, ya que no se sabe por qué camino ir, ni mucho menos centrar la historia en un solo hecho.
Son tantas las cosas que están sucediendo en pantalla (Tony se descubre a si mismo, hay una lucha con la competencia, una mujer de la cual no se sabe mucho, una continua referencia hacia “Los Vengadores”, un villano que se va preparando para el gran golpe, un amigo que se revela, etc.) que en cierto punto la cinta comienza a hacerse algo lenta, carente de acción y humor.
Los efectos especiales son asombrosos, especialmente los de las escenas finales. La música es correcta, pero algo decepcionante, ya que no se escuchan en cantidad las canciones de AC/DC como la publicidad anunciaba. El trabajo de dirección es increíble, los ángulos muy buenos y la fotografía bella y sencilla.
“Iron Man 2? es una secuela inferior a su antecesora, algo desordenada en su desarrollo, pero que satisface y amerita su disfrute. Otro ejemplo que pone en evidencia que Robert Downey Jr nació para ser actor y para encarnar a Tony Stark. Cine pochoclo al 100% que satisfacerá a sus fanáticos.
UNA ESCENA A DESTACAR: todo el desarrollo final
Quedense hasta el final de los créditos porque hay una gran sorpresa que será placentera para todo fanático de las historias de Marvel.