Sólo eso, un mínimo detalle. Con un poquito de rock hubiese sido perfecta.
Es que a la nueva Iron Man, al contrario de su predecesora, no se le puede criticar muchas cosas. Tiene la dosis perfecta de acción, efectos especiales, ironía y conexión con las otras entregas y un villano que garpa desde el principio al final. Ni hablar de Robert Downey Jr… Pero, sí, le faltó ROCK.
En Iron Man 2, ni siquiera Robert Downey Jr., pudo salvarse de las críticas. Sin embargo todos recordamos y estallamos cuando escuchamos AC/DC acompañando esa entrada estelar de Tony Stark en el traje de Iron Man. ¿Cómo no? Si de eso se trata, un rock star en traje blindado que se dedica a gastar en tecnología, autos, buena vida y mujeres (bueno, ahora no tanto… el amor lo cambió… y la Srta. Peppers vale el sacrificio).
“Cada uno crea sus propios demonios” es la frase que estructura todo el relato de la película, que nos invita a conocer el pasado de Tony Stark y aventurar el futuro del superhéroe. En esta nueva entrega vemos a un Tony Stark un poco más alterado de lo normal, con ataques de ansiedad (o pánico) y totalmente obsesionado en estar preparado para el próximo ataque. Con muchas referencias a “Los Vengadores”, Iron Man 3 nos muestra un costado extraño de Stark, enamorado y frágil ante la nueva amenaza: “El Mandarín”.
No se puede decir mucho más de Robert Downey Jr., un actor al que le cabe a la perfección el rol de Tony Stark, tanto que hasta parecer haber sido creado para él. Pero lo mejor de esta película es la acentuación de su lado infantil, punto fuerte cuando pelea con su nuevo amigo: un niño de 13 años.
Por otro lado, aquella damisela que solía interpretar Gwyneth Paltrow desaparece. No es literal, pero el cambio es tan grande en el personaje y le aporta tanto a la película que termina siendo un cambio radical. El rol de Peppers es fundamental en el desarrollo de la trama y el desenlace. Un gran acierto.
El villano para esta película está perfectamente planteado. Sorprendente, inteligente y desconcertante. No voy a decir mucho más, para no hacer spoilers de la película, pero cabe destacar que en esta entrega veremos más pelea y trajes que en las anteriores. Ah, otro detalle, no sean ansiosos y esperen hasta el final de los créditos… siempre guarda una sorpresa.
Como dije antes, todo esto se conjuga para darnos una de las mejores entregas de Iron Man. Pero le falta esa dosis que salvó a la segunda película: AC/DC.