Menos Rock, más Pop
Lamento no compartir la emoción y exitación de varios críticos y fans de la franquicia con esta 3ra entrega. En serio que lo lamento porque a mi forma de verlo, Iron Man es uno de los héroes más atractivos y cool que tiene Marvel, pero la verdad es que esta última entrega no colmó del todo mis expectativas y me pareció una producción de superhéroes del montón.
Para empezar creo que directamente perdió su aura rockera, esa que la hizo tan copada en 2008 y que ya se había visto disminuida con la 2da entrega en 2010. Tony Stark representa el estilo Rock & Roll, la irreverencia, la rebeldía, la incorrección política, sin embargo en esta última entrega se le imprimió un perfil más inocente y se notó la mano oculta de Disney. No me malinterpreten, me gustan los productos Disney por lo general, pero hay que separar los tantos cuando se trata de diferentes productos. Como diría aquella publicidad local de bebida espirituosa, "al pan, pan y al vino..." No es una buena estrategia que Disney suavice la oscuridad innata que tienen algunos cómics de Marvel sólo para mantenerse en la línea familiar que marca su camino comercial. Si a Iron Man se le quita el Rock y a los villanos la oscuridad, se corre el riesgo de caer en una fórmula de aventuras default que trasmita pocas sensaciones al espectador. Por ahí leí algunos intentos de comparación con la trilogía cinematográfica de Nolan sobre Batman... por favor, piensen bien antes de cometer semejante estupidez. Este Iron Man actual es un héroe para adolescentes más bien tirando a niños, a diferencia de la adultez que presentó la historia del caballero de la noche que claramente no tenía como target principal a los más chicos.
Otra cuestión que me pareció un gran WTF fue lo que decidieron hacer con El Mandarín, villano histórico de Iron Man que en esta 3ra entrega aparece satirizado como consecuencia de una vuelta de tuerca caprichosa.
Entre las cuestiones positivas de este film, están los aspectos técnicos que son increíbles, tanto visuales como de sonido, de eso no hay queja que valga. En una mínima escena en la que Tony se pone uno de sus trajes, demuestra toda la pericia profesional que Michael Bay no logra en su casi 3 horas de tortura Transformer.
En general la trama se plantea interesante y titánica, con algunos aciertos como el potenciamiento de Pepper Potts y el hecho de mostrar a un héroe más vulnerable, y otros no tanto como por ejemplo la personalidad de los villanos.
En general es una película que entretiene, que ofrece humor y grandes escenas de acción, pero eso no basta para estar a la altura de "Los Vengadores" o la mismísima "Iron Man" original que, según la humilde opinión de este fan del cine, sigue siendo la mejor de la franquicia sin lugar a dudas.