El fantasma
Llega un thriller donde las sospechas están a la orden del día y, quién mejor, que Jack Reacher para desentrañar el misterio. Encarnado por un siempre juvenil Tom Cruise, el personaje central es una suerte de fantasma: no tiene pasado, ni cuentas bancarias, ni domicilio y tampoco celular. Y cuando reaparece hay que seguirle el rastro.
Jack Reacher: Bajo la mira es un convincente relato de suspenso de Christopher McQuarrie (también dirigirá a Cruise en Misión Impósible 5) en el que las apariencias son engañosas y no todo lo que se ve es tal como sucedió.
Un francotirador elimina a cinco personas y ahí hace su aparición la abogada defensora (Rosamund Pike) del culpable (que tiene como destino prisión perpetua o la muerte), y también hija del fiscal (Richard Jenikns), quien se verá envuelta en una laberinto de dudas y recibirá la ayuda de Jack Reacher, perseguidor y perseguido, para arribar a la verdad.
El film acumula peleas, tiroteos, armas de todo tamaño y calibre y persecuciones automovilísticas, pero su fuerte reside en la buena trama que sostiene a personajes siniestros, a un villano encarnado por Werner Herzog y a un afilado Robert Duvall, ayudando al héroe en cuestión. El resto lo tendrá que adivinar el espectador, quien también estará en la mira de una historia repleta de giros (la acción del comienzo se mostrará en reiteradas ocasiones y desde otros puntos de vista) y traiciones.