“Jamás llegarán a viejos”, de Peter Jackson
Por Hugo F. Sanchez
Es bastante usual ver documentales de la Segunda Guerra Mundial, pero son bastante menos frecuentes los de la Gran Guerra (1914-1918), principalmente porque el cine tenía unos pocos años y además, era silente. Peter Jackson (El Hobbit, Criaturas celestiales, El señor de los anillos) tuvo acceso a más de 600 horas de filmación del Museo Imperial de la Guerra de Gran Bretaña, que primero restauró, para luego intervenir lo materiales de manera audaz y polémica: pasó las cintas de 13 a 24 cuadros por segundo, las coloreó, con ayuda de lectores de labios le puso sonido a las palabras mudas de los soldados registrados por las cámaras de la época, agregó el estruendo de los obuses, insertó fotos, dibujos y también recurrió a los testimonios de veteranos.
Jamás llegarán a viejos es un documental diseñado desde el found footage -combinar distintos materiales encontrados para darles nuevos sentidos- con una clara manipulación para lograr una mirada posible sobre los jóvenes que fueron a la Primera Guerra Mundial, “la guerra que iba a terminar con todas las guerras”.
La película es profundamente humanista porque está centrada en esos muchachos, muchos de ellos de 14, 15, 16 años, que mentían y eran alentados a mentir sobre su edad para lograr ser admitidos en los centros de reclutamiento. Se ven las largas colas sonrientes de hombres, el entrenamiento, la alegría de la poróxima aventura, los testimonios de la época que resaltaban que muchos de los reclutas provenían de lugares miserables y que por primera vez en su vida estaban bien alimentados y tenían acceso a la atención médica.
Y después la muerte, el hedor de los cadáveres de hombres y animales, el barro, el pié de trinchera -el frío y la humedad hacían que las extremidades se infectaran y en algunas casos debían ser amputadas- y el sonido, (agregado, claro) de los obuses, el terror de los soldados, los rostros desencajados.
Jamás llegarán a viejos muestra el verde de los uniformes, las caras sonrosadas y mugrientas de los chicos, el rojo de la sangre. Imágenes sonidos, edición, son los elementos de la puesta para traer al presente a una generación, toda una época que toma su dimensión específica ahora, para que con la percepción del presente sea posible asomarse al heroísmo, el candor, la miseria y la inutilidad de la guerra.
JAMÁS LLEGARÁN A VIEJOS
They Shall Not Grow Old. Reino Unido/Nueva Zelanda, 2018.
Dirección: Peter Jackson. Edición: Jabez Olssen. Distribuidora: Warner Bros. Duración: 99 minutos.