Volvió para matar
Jeepers Creepers 3 es una película de terror dirigida y escrita por Victor Salva. El reparto incluye a Jonathan Breck, Stan Shaw, Gabrielle Haugh, Meg Foster (Carla Grunwald en la serie Pretty Little Liars), Brandon Smith, Chester Rushing y Jordan Salloum. Los hechos de la película se dan entre la primera y segunda entrega de la saga.
Cada 23 años y durante 23 días el monstruo volador denominado “Creeper” (Jonathan Breck) vuelve al ataque de un pueblo distinto, matando y llevándose los cadáveres en su camioneta indestructible. Esta vez el turno de enfrentarlo será del sheriff Dan Tashtego (Stan Shaw) junto a Davis Tubbs (Brandon Smith). Por otro lado, la anciana Gaylen (Meg Foster), a la que su nieta considera loca por verla hablar sola, desentierra algo peligroso fuera de su casa.
Hasta el más fanático de la franquicia se va a sentir decepcionado con esta tercera parte mal hecha. Y es que su comienzo masomenos aceptable, con una fotografía bella de cielos rosados, a medida que transcurren los minutos va cayendo en errores enormes. Primero y principal, el “Creeper” es extremadamente ridículo: un hombre con la piel pintada de negro, alas y poco pelo rubio (que parece atado) ni siquiera llega a dar miedo a la persona más asustadiza. Se intenta de manera muy forzosa darle un aspecto temeroso al captar en primer plano su mirada potente, pero ni eso consigue que al aparecer en pantalla pensemos “qué bizarro es”. Segundo, el bajo presupuesto llega a ser tan notorio que sus efectos dan gracia, haciéndonos imposible que nos podamos tomar en serio lo que vemos. Lo peor es que desde la dirección y actuación se le da un dramatismo a la historia que en ningún momento logra conectar con el espectador.
Como si fuera poco, las incoherencias no tardan en llegar. Los humanos a cargo de acabar con el Creeper de una vez por todas ya saben que las balas no le hacen nada ni a él ni a su camioneta, sin embargo se pasan persiguiéndolo en coche a la vez que le disparan. La anciana que habla con su hijo muerto afirma que una vez que los oficiales toquen la mano del monstruo, conocerán el secreto de cómo aniquilarlo; este tema queda totalmente en la nada luego de que los policías le hacen caso: es como si el guionista se hubiese olvidado el camino por el cual estaba llevando la historia.
Los personajes cliché están a la orden del día: el grupo de jóvenes bravucones que quiere abrir el vehículo del villano, la chica que corre por su vida, el chico enamorado y tímido, etc. El ritmo de la película tampoco ayuda y en su segunda mitad llega a aburrir por tener muchos minutos demás.
Nadie pidió por una tercera parte de Jeepers Creepers. Ahora que la tenemos está muy claro que el film no hubiese molestado si se usaban elementos del género correctamente. Ya cuando el personaje principal tiene que asustar y en vez de eso causa risa la producción debería haber dado marcha atrás. Esta película ni por asomo te dará terror, pero si querés divertirte un rato por todo lo mencionado más la notoria pantalla verde en la mayoría de las escenas y las cuatro melodías que se repiten cada dos por tres, adelante.