La primera película de John Wick sorprendió con sus criminales civilizados y un lenguaje sencillo pero contundente. El universo creado por los directores Chad Stahelski y David Leitch y el guionista Derek Kolstad -que se inspiró en filmes como Ronin (1998) y el clásico spaghetti western Érase una vez en el oeste (1968)- consiguió que Sin Control (John Wick, 2014) sobresaliera en el cine de acción contemporáneo. John Wick 2 (John Wick: Chapter 2) es una muy buena secuela que vuelve a lo que funcionó la primera vez: escenas con grandes peleas cuidadosamente coreografiadas, diálogos breves y eficaces, y su propia mitología.