Renée Zellweger sobre el arcoiris
A la hora de realizar una biopic, algunos directores deciden hacer un repaso de la vida de la persona en cuestión o tomar solamente un momento en particular. Rupert Goold se decidió por este último enfoque para llevar a cabo “Judy”, que cuenta la historia de Judy Garland, una de las actrices más grandes de la historia de Hollywood, interpretada por Renée Zellweger.
Garland, nacida como Frances Gumm, firmó un contrato desde muy joven con los estudios Metro Goldwyn Mayer y saltó a la fama tras interpretar uno de sus papeles más recordados, el de Dorothy en la famosa película “El Mago de Oz” (1939). Pero su vida privada siempre estuvo definida por su inestabilidad, drogas e intentos de suicidio. Goold, se centra en el último año de vida de la artrista, cuando decidió viajar a Londres para dar una serie de conciertos mientras luchaba por la tenencia de sus hijos más pequeños con su ex marido Sidney Luft.
El verdadero atractivo de esta película es Zellweger, quien realiza un derroche físico y anímico superlativo, al punto de volverse irreconocible. Vale la pena mencionar que la actriz es quien interpreta las canciones en vivo, y adquiere gestos idénticos a los de Garland. Deja todo en cada escena, especialmente en los primeros planos, con expresiones que nos transmiten esa sensación de que algo está realmente “roto y perdido” en su personaje.
El guión de la cinta alterna entre el último año de vida de Garland y su adolescencia, donde comenzó a cimentar su carrera como joven actriz prodigio y fue víctima de distintos abusos, como la explotación laboral y el uso indiscriminado de fármacos, que terminarían marcando su vida. Los traumas, sus relaciones románticas enfermizas y la necesidad por el cariño están demostradas sin sutilezas, lo que empaña un poco la película.
Una biopic que no arriesga de traspasar los límites de lo convencional, con una admirable reconstrucción de época, tan efectista como superficial, que se apoya por completo en la actuación de Renée Zellweger, que sabemos que del otro lado del arcoiris le espera un Premio Oscar.
Por Federico Perez Vecchio
Puntaje: 6,5 / 10