La Isla Nublar está al borde del colapso debido a un volcán en erupción. Muchos son los grupos ecológicos que luchan por los derechos de los dinosaurios, y una empresa multinacional decide salvar a los enormes reptiles, trasladándonos a un santuario natural donde van a poder vivir en paz y libertad. Es por ésto que Claire y Owen son reclutados para atrapar a los prehistóricos animales para salvaguardarlos. Pero un oscuro y sórdido plan se esconde detrás de tan buena intención.
Nos llega la secuela del re inicio/continuación de Jurassic Park, con menos hype del que podría esperarse. Primero porque la anterior entrega no fue el éxito de crítica (especializada y de público) que se esperaba, pero porque además, el trailer de Jurassic World: el reino caído dejó a varios con una sensación de “meee” que por desgracia, se confirma con esta movie.
Un pequeño bagre
El motivo de dicho pensamiento, no es que en el avance se nos mostró la mejor secuencia de Jurassic World: el reino caído, sino que hay una sucesión de momentos que no solo van a dar ganas de hacer el famoso facepalm, sino que rozan la vergüenza ajena.
No vamos a puntualizar en cada uno de ellos, pero solo acuérdense de nosotros en cierta escena bajo el agua. Si podemos decirles que estamos ante uno de los peores personajes de alivio cómico de los últimos años. Y es el que el rol del sujeto que se la pasa gritando, en un ambiente fuera de su hábitat natural, ya dejó de ser gracioso hace tiempo, y en este caso en particular, además, roza lo irritante.
A ésto debemos sumarle, que Jurassic World: el reino caídovuelve a cometer algunos errores vistos en su antecesora (no por nada uno de los guionistas vuelve a ser Colin Trevorrow), como por ejemplo, el de abrir sub tramas que en este film no tienen cierre, o presentar personajes que son irrelevantes, con la esperanza que en la tercera película si lo sean, haciendo de esta cinta, más un trailer del final de la saga que una movie independiente y con sentido propio.
El nuevo Cesar
De todas formas, no todo es malo. Por suerte siguen estando Bryce Dallas Howard (ahora con botas) y Chris Pratt en el elenco, para resolver a base de talento y carisma, más de una situación que con otros actores hubieran sido insalvables. Es una pena que no sean bien secundados por el resto del elenco.
Jurassic World: el reino caídotermina siendo un producto en toda su palabra. Como film de entretenimiento cumple y ya, pero dentro de una semana nadie se la va a acordar. Eso sí, todos vamos a querer tener en nuestros estantes, los muñequitos de los dinosaurios.