Khumba

Crítica de Diego Curubeto - Ámbito Financiero

Sobre cebras y simbolismos

Este raro ejemplo de cine de animación sudafricano augura potencial futuro para la industria de ese país, e indudablemente tiene mucho atractivo para el publico infantil. Khumba, el personaje al que se refiere el título, es una joven cebra macho hay que distinguir el género, ya que el protagonista también tiene su noviecita hembra- que nació con una particularidad: sólo tiene rayas en la mitad delantera del cuerpo, mientras que el resto es blanco. En la comunidad de las cebras seres bastante simples de acuerdo con el film, donde el fútbol es el tema central de todas la comunidad- esta diferencia es recibida como un mal augurio, relativo a la falta de agua. Esto es muy importante porque la vida de las cebras depende de la única laguna que existe alrededor de un enorme desierto.

Justamente, luego de la llegada de la discriminada como "media cebra", deja de llover y la laguna se seca, poniendo en peligro a todos. Con la ayuda de un saltamontes, un buey y un avestruz, el joven Khumba, cansado de que lo discriminen y le achaquen la culpa de la sequía, emprende un peligroso viaje en búsqueda de otra fuente de agua.

El director Anthony Silverston maneja muy bien los distintos paisajes africanos de esta aventura, inclusive cuando los animalitos estelares se cruzan con la civilización. En cambio, no toda la acción animal tiene el mismo nivel, dando lugar a ciertas situaciones repetidas, como por ejemplo la andanzas de una hiena desagradable o un leopardo malo que, desde luego, los sigue como presa. Con todo, Khumba es simpático y carismático, y hay momentos de humor bastante logrados y un innegabe atractivo visual. El doblaje al español impide apreciar las performances vocales de excelentes actores como Laurence Fishburne y Steve Buscemi.