No tengo demasiados gratos recuerdos de KICK ASS, la película original. Siendo sinceros, recién al empezar a ver KICK ASS 2 pude confirmar que sí, que había visto la original, pero tan poco es lo que recuerdo de ella que es como si se tratara de una película que vi hace 20 años. Veo que se ha transformado en una película de culto y me entero que la secuela la estrena aquí la cadena Village -que le compró los derechos a UIP, distribuidora que había decidido no estrenarla-, pero de todos modos me sigue resultando una experiencia bastante ajena.
El culto a la película viene de una historia que nacida en el mundo del comic y que plantea un mundo en el que los adolescentes se inventan sus propios superhéroes, se crean un nombre y un disfraz (bastante berreta y casero) y salen a combatir el mal por las calles. Entre la parodia, el homenaje y la película de acción, KICK ASS 2 pone en evidencia el sistema de identificación en el que se apoyan las películas de este género. Es como si un grupo de fan-boys de esos que inundan el Comic-Con salieran disfrazados a la calle y se tomaran en serio sus roles.
kickass2cLa película, más allá de un mínimo coqueteo con el tema, jamás se preocupa por las implicancias más o menos reales de este tipo de planteo. Retoma las aventuras de Kick Ass (Aaron Taylor Johnson), Hit Girl (Chloë Moretz, la verdadera protagonista del filme) y un grupete de wannabes de superhéroes (incluyendo Jim Carrey en un breve y bastante desgraciado rol), luchando contra una serie de villanos liderados por el supuestamente temible Motherfucker (Christopher Mintz-Plasse). Y cada uno de ellos, además, debe tratar de zafar de las prohibiciones familiares, aparentemente absurdas, de que eso de salir disfrazado a combatir el crimen es un poco ridículo. En el caso de Hit Girl -en la mejor y más paródica subtrama del filme- lo más interesante será su intento por integrarse al grupo de las “chicas populares” del colegio, con resultados previsiblemente desastrosos.
Entre traumas familiares y conflictos que se toman demasiado en serio (a la película le vendría mejor un tono decididamente más paródico), nuestros héroes demuestran ser bastante capaces e inusualmente sanguinarios en la tarea. Lo cual nos lleva al asunto, para mí, central, de esta -en otros sentidos- bastante menor película de superhéroes. Más allá del paraguas que brinda el género, el nivel de violencia de KICK ASS 2 es brutal, excesivo.
kickass2bComo cualquiera, puedo entender y justificar cierto nivel de violencia utilizado en películas de género (me banco hasta las películas más rotundas y sangrientas) y entiendo todos y cada uno de los guiños, pero hay algo en esta película que me resulta un poco repulsivo. Tal vez sea la combinación de la inocencia de los adolescentes y nerds protagonistas con un baño de sangre propio de una película gore de clase Z (y con algo que no es otra cosa que una violación), tal vez la impericia de los realizadores como para que esa virulencia se integre mejor en la puesta en escena, pero lo cierto es que el asunto se vuelve bastante insoportable y quita casi toda la posible simpatía que podría generar la absurda trama.
Como “fantasía cumplida” de adolescente fanático de los comics, KICK ASS 2 resulta un poco perturbadora e incómoda. Y eso, curiosamente, es lo que la hace peor como película pero más interesante de ser vista y analizada, acaso no desde su casi nulo costado cinematográfico sino de uno, si se quiere, sociológico. Es interesante, como prueba, verla junto a THE DIRTIES, una película que deja en claro que tal vez no sea del todo una gran idea -y mucho menos, algo heroico- que los adolescentes “perdedores” o marginados salgan a descuartizar a sus enemigos como si nada. Si esto es el mundo real -como aseguran una y otra vez los protagonistas- las consecuencias pueden ser desastrosas.