Con trastabilleos, pero sale airosa
"Kick-Ass 2" fue una película que encontró miles de problemas de distribución en Argentina, de hecho se estrenó en muy pocas salas. Además de esto, varios críticos especializados le dieron con un caño porque decían que este entrega era muy repetitiva con respecto a lo que vimos en la primera y encima Jim Carrey, arrepentido de haber participado en una producción tan violenta como esta, salió a hacer una especie de contra publicidad. Más allá de todas estas piedras en el camino, los fans son quienes deciden o no el éxito de un producto como este, y la verdad es que en este sentido logró una amplia aceptación entre sus seguidores y cumplió con las expectativas de casi todos.
Personalmente debo decir que disfruté mucho la "Kick-Ass" original pero nunca me consideré un fanático empedernido, por lo que mis expectativas con respecto a esta secuela no eran demasiado altas. Con una mirada un tanto más objetiva que la que pueden tener sus amantes incondicionales, opino que este trabajo del director Jeff Wadlow es muy entretenido y respeta el concepto trabajado originalmente. Tiene inconsistencias de guión, eso sí, con algunas escenas de relleno y diálogos un tanto sonsos, pero más allá de esto logra salir airosa del desafío e incluso abre el universo Kickassero para desarrollar toda una franquicia exitosa, con spin off y demás yerbas que se utilizan para expandir una saga atractiva como esta. El trío Moretz, Johnson y Mintz-Plasse vuelve intacto, con sus personalidades bien marcadas y el carisma que los caracteriza. La mayor parte del humor está a cargo del villano, Mintz-Plasse, quien hace un buen trabajo como motor de la bizarreada y el descontrol. La adición de nuevos personajes como Night Bitch, Dr. Gravity, Mother Russia y el Coronel Stars and Stripes es un acierto, más allá de que Carrey no piense lo mismo.
Hay varias escenas de violencia hardcore a cargo de Hit Girl (Moretz) y la asperísima Mother Russia (Olga Kurkulina), que le suben la tensión a la historia y les dan a sus fans lo que buscaban, super héroes adolescentes, con problemáticas adolescentes y una conciencia claramente políticamente incorrecta, pero que a todos nos ha invadido durante la juventud 8sigo siendo joven, aclaro, ja).
En resumen, un producto que encontrará buena recepción entre sus seguidores, que entretiene y piensa mucho en lo que el fan estaba esperando. Si la distribución no hubiera tenido tantos problemas, seguramente no le habría ido tan mal en ciertos sectores especializados de crítica. No es una cosa de locos y pierde un poco el efecto sorpresa de la primera, pero más allá de esto es un buen producto de aventuras y acción adolescente.