A pesar de su desarrollo algo confuso, donde los vericuetos de la trama a veces se cierran innecesariamente, esta comedia irónica de Vaughn merece ser vista mucho más que varias superproducciones que avanzaron sobre el mismo terreno. Lo que el espectador debe tener en cuenta desde el principio, si quiere ser cómplice de esta aventura, es que la mira desde donde observa esta colorida revisión de los mitos del cómic es, sobre todas las cosas, sarcástica. La ultra violencia de las escenas también tiene que ver con lo sarcástico del show. Así, el justiciero enmascarado, este superhéroe de la era digital llamado Kick Ass, puede llegar a satisfacer tanto a los internautas –sobre todo los generación youtube– como a los más desinformados, así como en la ficción cumple las expectativas de las capas medias neoyorquinas, esa misma gente que lo convertirá en un auténtico fenómeno popular en la ciudad. Claro que él no es el único superhéroe en Nueva York. Muy buenas actuaciones (hasta la de Nicolas Cage), siempre en beneficio de sus personajes, aunque sobresale Chloe Moretz, una niñita que va a dar mucho de qué hablar. Divertidísima película, violencia con mucho humor y emoción.