Kick-Ass logró lo que no consiguió ninguna película hasta ahora en lo que va del año, superar mis expectativas de manera rotunda. Y aclaro por las dudas que era una de las cintas que más me generaba a priori.
La película arranca con Dave Lizewski relatando los cambios en su vida a partir de su nueva identidad llamada Kick-Ass. El protagonista se pregunta porqué nadie ha intentado ser un superhéroe y es allí cuando comienza a concretar la respuesta a esa pregunta, convirtiéndose en la inspiración que su ciudad necesita. Es luego de esto cuando comienzan las dos horas casi ininterrumpidas de pura diversión y digo casi ininterrumpidas porque solo en el medio el ritmo decae un poco.
Me encantó la manera en la que Matthew Vaughn combinó la acción, con el humor y la esencia de los comics. Se vió un muy buen laburo de Vaughn (¡¡¡es el marido de Claudia Schieffer!!!) en las escenas de acción y las secuencias de lucha que involucran a la protagonista femenina y los demás actores.
Algo que me gustaría destacar es que la película es bastante "sangrienta" por decirlo de alguna manera y eso fue algo que me sorprendió para bien. Además de no esperar tanta sangre y violencia junta, me encantó la manera en la que se aprovechó porque tampoco sirve mostrar esos recursos sin una justificación. Sin dudas otro gran acierto del director de Stardust, el Misterio de la Estrella.
La historia de Kick-Ass no es original, pero esta película gana una amplificación espectacular de la mano de las excelentes actuaciones. Aaron Johnson es el personaje principal y lleva adelante un personaje de loser muy creíble que seguramente no debe distar de como es él en realidad, me hizo acordar bastante a los personajes que llevan adelante Jesse Eisenberg y Michael Cera en sus caracterizaciones. Nicolas Cage interpreta a Big Daddy, un superhéroe entrado en años, sediento de venganza. Realmente el personaje que lleva adelante el actor de Un Ángel Enamorado es brillante y ojalá eso haga que vuelva a ser el buen actor que alguna vez fue. Me hubiera gustado ver un poco más a Christopher Mintz-Plasse, pero seguramente que lo guardaron para explotar más su personaje en la secuela que saldrá a la luz en dos años. Sin dudas quien se come la película es Chloe Moretz, la pequeñita de solo 13 años que interpreta a Hit Girl, una superhéroe que no tiene el más mínimo gramo de temor y que también lleva una increíble sed de venganza concentrada en todo ese cuerpito. Realmente la voz, las caras, los gestos y hasta el movimiento del cuerpo de Moretz fueron brillantes a lo largo toda la cinta. Solo resta Mark Strong que sigue con su personaje de villano que tan bien le queda.
Obviamente que cuando una película tiene todas las actuaciones en un nivel así, el gran responsable de esto es el director porque supo llevar a los actores a interpretar sus labores con esa calidad.
Mención aparte para la música que es increíble y acompaña cada escena a la perfección.
Kick-Ass se lleva el primer puesto de lo mejor que he visto en este año por sus actuaciones, una gran dirección y su humor ácido y violento.