Krampus

Crítica de Alexis Puig - Infobae

En el mes de las fiestas, también se estrena Krampus, que presenta una leyenda europea que reza que los niños que se han portado mal, reciben en la noche de Navidad la visita de un siniestro demonio. Max, un niño tímido, debe unirse junto a su disfuncional familia para vencer al siniestro ser opuesto a la figura de Santa Claus y a los iconos navideños que han cobrado vida y acosan su hogar en una noche tormentosa.

Esta clase B de bajo presupuesto, desarrolla una historia de terror en el marco de la NocheBuena. Michael Dougherty, el director, hace agua con un guión flojo, elemental, que sumado a actuaciones burdas y efectos especiales muy rudimentarios generan una de las peores cintas del género del año. Sin un buen manejo del suspenso y pocos momentos de terror puro, no funciona ni como parodia ya que los momentos que se pretenden de humor negro apenas si logran sacar una mueca.

Lejos de la originalidad de clásicos como Sangriento Papa Noel o Gremlins, esta fusión de horror y fiestas navideñas es tan poco atractiva como olvidable.