La tercera película de Kung Fu Panda presenta una historia más atractiva de lo que daban a entender los avances promocionales.
Si bien los trailers estuvieron enfocados en las situaciones humorísticas, el argumento del nuevo film mantiene el drama y el misticismo de las artes marciales que convirtieron a esta propuesta en una serie muy especial.
Una característica que distinguió a las aventuras del panda es que brindaron historias divertidas para los más chicos, pero los conflictos además incluyeron conceptos interesante relacionado con la filosofía del Kung-fu .
Recuerdo que para el momento en que se estrenó Shrek 3 la saga había decaído por completo porque los directores de esos filmes se limitaban a repetir la misma fórmula argumental.
Kung Fu Panda resultó un personaje mucho más cuidado y los realizadores se encargaron de desarrollar un aspecto diferente de la personalidad del oso que fue evolucionando en cada capítulo.
En la entrega anterior el protagonista alcanzó la paz interior luego de descubrir la historia de su origen. Po ya está consolidado como maestro de Kung Fu y en esta historia debe lidiar con la responsabilidad que acarrean sus habilidades especiales.
La particularidad de este episodio es que los directores disminuyeron el contenido dramático del conflicto para centrarse un poco más en el humor.
Por consiguiente, Kung Fu Panda 3 podría ser considerada la película más débil que presentaron los estudios Dreamworks hasta el momento en la saga. Esto no quiere decir que sea decepcionante, sino que esta vez los realizadores no lograron superar los filmes previos que fueron brillantes.
Uno de los elementos más atractivo de esta historia pasa por la relación que tiene Po con los Cinco Furiosos y el Maestro Shifu, quienes en la nueva producción quedaron relegados a un plano muy secundario. En esta aventura se los extraña bastante.
La película desarrolla más la relación del protagonista con su padre biológico, pero el personaje nunca llega a tener el mismo atractivo que los compañeros tradicionales del oso como para hacer más interesante la película.
De todos modos el conflicto luego levanta por completo en el segmento final donde el drama y la acción vuelven a cobrar protagonismo.
Desde los aspectos visuales, Kung Fu Panda 3 se destaca entre las mejores producciones de Dreamworks.
Los detalles de los escenarios y las coreografías de artes marciales son brillantes y el formato 3D estuvo bien aprovechado especialmente en las secuencias de peleas.
Kunf Fu Panda tal vez se ubica un escalón por debajo de las películas previas, pero no deja de ser una muy buena producción de este género que merece su visión en el cine si te enganchaste con la saga.