Misterios, libros… y pizzas.
Si hiciéramos una encuesta durante la proyección de La biblioteca de los libros olvidados estoy seguro que el 90% de los espectadores sabría dar respuesta a todos sus interrogantes. Algo que no impide que la película se disfrute e interese, ya que aunque el misterio es evidente hay que reconocer que La biblioteca de los libros olvidados: Misterios, libros... y pizzas 3estamos ante una buena película.
La historia nos cuenta el misterio de Henri Pick. Un cocinero al que se le atribuye la autoría de uno de los libros más importantes de los últimos años. Todo un misterio ya que nadie vio a este pizzero escribir o leer un libro durante su vida. Cuando la novela se convierte en un increíble éxito de ventas, un crítico intentará descubrir la verdad.
La biblioteca de los libros olvidados es una historia llena de incógnitas en la que lo menos interesante son sus preguntas. El auténtico motor son sus protagonistas llenos de matices y muy bien definidos. En este sentido el crítico literario interpretado por el veterano Fabice Luchini es el ejemplo de personaje carismático y con un fondo muy trabajado, un gruñón cascarrabias que irá aprendiendo que lo intelectual no es lo más importante en la vida. Se sigue con gran interés las desventuras y problemas de este personaje que parece no tener nada de suerte y vive con una venda en los ojos.
Como contrapunto nos encontramos con la adorable Camille Cottin, dando vida a la hija del pizzero, y definiendo un personaje muy sutil y lleno de sentimientos. El encuentro entre ambos protagonistas siempre funciona y todas las escenas que comparten son lo más interesante de la cinta.
Gracias a estos personajes Bezançon construye una extraña historia de amor en la que los protagonistas irán tratando de resolver los puzzles que se les presentan. Podría decirse que estamos ante una road movie de sentimientos en el que los misterios no importan demasiado y sí el destino final.
El film tiene todos los ingredientes para convertirse en uno de los éxitos del año en Francia y todo dependerá de la promoción que se le haga en Argentina para que tenga un éxito parecido. Es cierto que sus misterios puede que sean La biblioteca de los libros olvidados: Misterios, libros... y pizzas 4algo evidentes, pero durante una buena parte de la historia se siguen con gran interés. Nada se siente impostado y la estructura narrativa se muestra sólida, si bien es verdad que el resto de personajes de la película queda engullido por los protagonistas.
Rémi Bezançon y Vanessa Portal, habitual colaboradora de este director, adaptan la novela de David Foenkinos con gran éxito y tono. Confieren a la cinta ese toque francés en la que los personajes disfrutan de un buen vino, de fiestas exclusivas en París y en la que los personajes hablan mucho y muy bien. En definitiva una historia que gustará a todo tipo de público y que nos deja con ganas de acercarnos a la obra de este director.