Eli Roth, conocido por su filmografía de terror, destacándose “Hostel”, se embarca por primera vez en la realización de una película infantil, basada en la novela homónima de John Bellairs (1973).
“La Casa con un Reloj en sus Paredes” cuenta la historia de Lewis, un niño que acabó de perder a sus padres en un accidente y que debe mudarse con su tío Jonathan a una casa bastante particular. Al poco tiempo descubrirá allí un mundo oculto de magia y hechicería, donde la bondad y la maldad se pondrán en juego.
Como dijimos anteriormente, Eli Roth está acostumbrado a realizar historias de terror con violencia explícita y, si bien ésta es una cinta infantil, no quedará ajena a los sustos y a un clima lúgubre y escalofriante, algo que puede llegar a aterrar a los niños. Nos recuerda un poco a la película “Un Monstruo Viene a Verme”, donde el director español J.A. Bayona, que también proviene del terror (“El Orfanato”), nos ofrece un drama de fantasía. Igualmente, en este caso es un film más naif que aquél ejemplo que profundiza una trama más compleja y oscura. De todas maneras, este tinte terrorífico se mezcla con el humor y la fantasía, generando un equilibrio entre cada uno de estos estilos.
El humor viene sobre todo a partir del personaje del tío Jonathan, interpretado por Jack Black, quien trae consigo una vasta experiencia en este ámbito. Es el comic relief necesario para contrarrestar la tensión provocada por la historia. También esta comicidad la podemos observar en la relación de amistad que mantiene con el rol de Cate Blanchett, una gran bruja, con la que se llevan como perro y gato, aunque en el fondo sean unidos. El trío protagónico lo completa Lewis, encarnado por Owen Vaccaro, quien compone a un niño con mucha luz y valentía, que aunque lleve a cabo acciones negativas con objetivos individualistas, hará lo posible por remediar la situación.
Uno de los puntos altos es sin duda la utilización de los efectos especiales, ya que es el recurso que permite que la historia se pueda llevar a cabo y crear el mundo mágico propuesto. Entre los aspectos técnicos también se destacan la fotografía y una banda sonora que acompaña correctamente.
En síntesis, “La Casa con un Reloj en sus Paredes” es un buen ingreso de Eli Roth al género infantil, aunque probablemente no sea para todos los chicos, ya que además de la fantasía y el humor existen varios pasajes con sustos y sobresaltos. Con un buen elenco a la cabeza y destacables efectos especiales, será una buena aventura para ver en los cines.