Esta es la opera prima del venezolano Alejandro Hidalgo, tuvo una buena repercusión en su país, nos resta ver como la reciben los espectadores de nuestro país. Cuenta con un buen montaje, se relaciona bien el pasado y presente, posee toques sobrenaturales, tiene un tono fantástico y elementos del terror gótico. Tiene un comienzo un tanto moroso pero luego va cobrando fuerza. Bienvenido al cine venezolano.