“La Casa Oscura” Crítica. La oscuridad detrás del duelo
No todo es lo que parece en este film de suspenso dirigido por David Bruckner.
Maria Paula Iranzo Hace 5 días 0 43
Después de la pérdida de un ser querido, una pareja, su ausencia es notoria: falta su voz, su tacto, su lado en la cama está vacante. Pero qué pasaría si uno descubriese que la persona amada no era quien decía ser y escondía un perverso secreto. Este es el dilema que afronta la protagonista de La Noche Oscura, que se estrenará el próximo 23 de septiembre en cines.
El thriller comienza con Beth (Rebecca Hall) intentando rehacer su vida después del inesperado suicidio de su esposo. Se quedó sola en una casa llena de recuerdos buenos y malos, ya que a muy pocos metros de ahí, en el medio de un lago, es donde ocurrió la tragedia. Pero lo extraño no tarda en aparecer: huellas humanas, voces familiares y visiones perturbadoras connotan una presencia que la llevará por un camino de revelaciones que desafiarán su cordura.
Al todo suceder de noche, el film se permite varios momentos de calma, a veces un poco largos, pero eso hace que los sobresaltos sean más efectivos y la atención esté más presente. Por lo que son los efectos especiales los que ayudan bastante a lograr esa sensación de algo en la nada misma, o sea, que el borde de una columna pueda convertirse en una silueta que se mueve repentina y velozmente sobre el espectador.
En el trasfondo de películas de thriller/suspenso se puede encontrar la expresión de los miedos que enfrenta el ser humano, y esta no es la excepción. La interpretación de Rebecca Hall tiene un balance entre fuerza, fragilidad y persistencia; perdió a su compañero de vida, pero no va a parar hasta poder entender qué pasó.
Finalmente, es importante remarcar la lección más importante que deja La Casa Oscura tras salir de la sala, y que se encuentra escondida en el film: no importa cuánta oscuridad haya alrededor, si uno se rodea de las personas correctas, se puede dar pelea.