Cerebro o corazón caliente, cuando la decisión es inevitable
Un hecho fortuito, inesperado, como un accidente de tránsito, altera la vida de las personas inevitablemente, y mucho más si se produce una muerte. Eso es lo que le ocurrió al Dr. Nariman (Amir Aghaee), un importante médico forense en Irán cuando, una noche, sale del trabajo y en la ruta un automovilista lo obliga a hacer una brusca maniobra que deriva en un choque contra una moto en la que iba un matrimonio, un bebé y un chico de 8 años, todos viajaban sin casco. El más perjudicado fue el nene con un golpe en la nuca, pero todos siguieron viaje sin otras lesiones de importancia.
Al día siguiente este nene es llevado al hospital donde trabaja el protagonista, para que le hagan una autopsia. Si bien el resultado fue que estaba intoxicado por comer alimentos en mal estado, la culpa taladra la mente del médico.
Esa es la decisión, que debe tomar. Hacerse responsable de la muerte o dejar todo como está. La película dirigida por Vahid Jalilvand gira en torno a esta cuestión. Pese a que los informes concluyentes indican que el nene contrajo botulismo, el Dr. Nariman hará todo lo posible para rectificar los resultados de la autopsia.
El relato se centra en dos puntos opuestos pero que los une un sentimiento, la culpa. Cada uno la procesa como puede o sabe. Por ese motivo el médico es más analítico y serio. El padre del chico, un humilde trabajador llamado Moosa (Navid Mohammadzadeh) es extremadamente visceral, porque también la ira se apodera de él y lo hace cometer acciones qué, en frío, no haría.
Narrada con buen ritmo, donde en cada escena pasa algo importante, podemos observar también las diferencias de clases sociales y el nivel socioeconómico de ellos. Actúan de ese modo, por la educación que tienen. Cerebro o corazón caliente. Las diferencias entre los personajes están muy bien marcadas. Delineadas desde el guión y confirmadas en las actuaciones.
El sonido ambiente y ciertos ruidos incidentales son suficientes para completar el desarrollo de una secuencia. No es lo más importante la parte técnica. No se la precisa. Los lugares donde ocurre el film no son fastuosos, ni mucho menos. Lo realmente interesante es la historia y cómo se la cuenta. El modo en que una situación trae aparejada a otra está descripto con objetividad, sin sutilizas. Por ese motivo cada una de las partes involucradas en la narración quisieran poder volver el tiempo atrás, para no pasar por el calvario que transitan desde que ocurrió el accidente.