VIUDA ENAMORADA
La novela de David ha sido un éxito. Y a partir de allí su autor decidió llevarla al cine junto a su hermano Stephen. Es una historia sobre la segunda oportunidad. En la vida y en el amor. Pero su resultado es desalentador: una estampa mal dialogada, liviana y absurda, más cerca de la cursilería que de la comedia romántica.
Al comienzo aparece una pareja. Muy enamorada y muy feliz. Demasiado perfecta para que dure, al menos en el cine. El muere en un accidente y la viuda no sabe qué hacer. Pero bueno, tiene buen trabajo un jefe que la persigue y un par de amigas. Pero un día le agarra un brote de no sé qué y le da un largo beso, sin aviso, a un empleado sueco, oscuro, amargo, sin gracia, el más perdedor de la oficina. Y allí empezará a desarrollarse una historia que se toma demasiado tiempo para decir tan poco. Porque el sueco, además, es inseguro, lento y aburridón. Como la peli.