La Deuda: Pagando a pulmón.
Nos ponen en la piel de una mujer con pocas horas para juntar miles de pesos, con un cuerpo y mente que a duras penas van a permitirle lograrlo a tiempo.
Una joven utiliza plata de su trabajo para gastos personales, y tiene horas para devolverla si quiere mantener su laburo. No es la primera vez, pero servirá como excusa en un viaje tan tranquilo como tenso que desfilara por familia, amistades y no tanto, en busca de los pesos que le faltan para la mañana siguiente. Una tensa noche llevada a pulmón por alguien acostumbrada a vivir día a día una existencia abrumadora. Su lentitud o tranquilidad pueden no ser para todo tipo de públicos, pero es un film con una intensidad mucho más interna que exteriorizada en secuencias físicas, pero con la fuerza necesaria como para carcomer a su protagonista desde adentro.
Producida por Agustín Almodóvar entre otros, resulta una recomendable experiencia que se atreve a hablar tanto del argentino como la Argentina en sí, al mismo tiempo que se ocupa de llevar adelante una trama muy específica de su personaje principal. El film parece por momentos ser una tesis acerca de la influencia que los problemas económicos tienen en la salud, o como causa y consecuencia de problemas afectivos. Una exploración de personaje que por suerte saben abundar año a año en el cine independiente nacional, y encuentra en La Deuda un gran exponente.
Gran parte del peso narrativo lo lleva a cuestas la protagonista, interpretada de gran manera por Belén Blanco; en uno de esos casos en que la habilidad en el casting se mimetiza con el acierto de decisiones, tanto del intérprete como del mismo director. Otro nombre para destacar es el de Marcelo Subiotto, en un papel secundario que refuerza y da un segundo respiro a la película para llegar a buen puerto. Pero claramente la influencia más grande que se siente es la del autor, guionista (junto a Gloria Peirano) y director, de la obra. Gustavo Fontán lleva adelante un relato tranquilo de esos que no necesitan mucha acción o movimiento para transmitir ideas o desarrollar sus temáticas.
Muy recomendable para casi cualquiera, pero especialmente para aquellos que mes a mes invierten lo que pueden en apoyar alguna que otra peli nacional. Un film hecho y casi que dedicado para los que se encuentran difícil navegar la vida con un bolsillo que día a día cuesta más llenar, y que no da abasto con el esfuerzo individual en pelear una batalla sistemática que debería ser de todos